Rajoy se da por satisfecho con la aclaración de que Alonso no les imputó el 11-M

La tensión entre el PP y el PSOE por las declaraciones del ministro del Interior, José Antonio Alonso, sobre si hubo "imprevisión política" del anterior Gobierno ante los atentados del 11 de marzo quedó ayer superada. "El ministro del Interior ha dicho que sus palabras no implican ninguna imputación de responsabilidad al anterior Gobierno por los atentados del 11-M", relató ayer Mariano Rajoy tras las dos horas que duró la reunión del Pacto Antiterrorista. El ministro, según Rajoy, les dijo que "no hará ninguna imputación de responsabilidad en el futuro". Y concluyó: "Yo con eso me doy por sat...

La tensión entre el PP y el PSOE por las declaraciones del ministro del Interior, José Antonio Alonso, sobre si hubo "imprevisión política" del anterior Gobierno ante los atentados del 11 de marzo quedó ayer superada. "El ministro del Interior ha dicho que sus palabras no implican ninguna imputación de responsabilidad al anterior Gobierno por los atentados del 11-M", relató ayer Mariano Rajoy tras las dos horas que duró la reunión del Pacto Antiterrorista. El ministro, según Rajoy, les dijo que "no hará ninguna imputación de responsabilidad en el futuro". Y concluyó: "Yo con eso me doy por satisfecho".

El portavoz parlamentario del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, apostilló que nadie había planteado rectificación alguna porque nunca el ministro, con sus declaraciones sobre "imprevisión política", hizo imputación de responsabilidad al anterior Ejecutivo. Simplemente, remachó Rubalcaba, Alonso hizo una "reflexión" similar a la que ha escrito "el ex presidente en el prólogo de su libro". Es en el epílogo del libro de José María Aznar donde aparece la frase sobre si su Gobierno pudo bajar la guardia, hipótesis que el ex presidente del Ejecutivo aprovecha para asumir su responsabilidad.

Conversación a solas

Para zanjar el asunto y tras dos horas de reunión, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del PP, Mariano Rajoy, se quedaron unos minutos más hablando a solas. A la salida se despidieron ante las cámaras con un apretón de manos.

La tensión acumulada en las dos últimas semanas entre el PSOE y el PP empezó a remitir el martes. Ayudaron varias conversaciones telefónicas, el lunes y el martes entre la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, y el propio Rajoy para preparar la reunión del Pacto. Y se vio en la Junta de Portavoces del Congreso de los Diputados ayer. Como muestra de la menor tensión, no hubo problemas en el acuerdo de quiénes serán los miembros de la Comisión de Secretos Oficiales, que se constituirá hoy en el Congreso y que será el foro parlamentario al que el Gobierno informe de la lucha antiterrorista.

Otro elemento que sirvió para escenificar la rebaja de la tensión fue el acuerdo para que la próxima semana se voten las dos peticiones de comisión de investigación del 11-M. Y la predisposición del PP y del PSOE de intentar pactar un texto conjunto. Además, ayer en el Pacto se evitó explícitamente hablar de esa comisión de investigación y de su contenido para no abrir nuevas heridas.