El PSOE impondrá una moratoria de dos años a la Ley de Calidad

La reválida, el hecho religioso y los itinerarios quedarán suspendidos hasta una nueva ley

El PSOE impondrá nada más llegar al Gobierno una moratoria de dos años a la Ley de Calidad de la enseñanza. La medida, un real decreto que se aprobará entre finales de mayo y principios de junio, implicará que las reformas que el PP pretendía imponer el curso que viene y siguientes (reválida, itinerarios o la introducción de la asignatura de Hecho Religioso) quedarán suspendidas. En los dos años de moratoria, siempre según fuentes socialistas, una comisión en la que estarán representadas todas las comunidades autónomas estudiará a "velocidad de vértigo" las iniciativas educativas que sustituir...

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El PSOE impondrá nada más llegar al Gobierno una moratoria de dos años a la Ley de Calidad de la enseñanza. La medida, un real decreto que se aprobará entre finales de mayo y principios de junio, implicará que las reformas que el PP pretendía imponer el curso que viene y siguientes (reválida, itinerarios o la introducción de la asignatura de Hecho Religioso) quedarán suspendidas. En los dos años de moratoria, siempre según fuentes socialistas, una comisión en la que estarán representadas todas las comunidades autónomas estudiará a "velocidad de vértigo" las iniciativas educativas que sustituirán a la Ley de Calidad.

La responsable de Educación en la Ejecutiva del PSOE, Carme Chacón, señaló ayer que algunas medidas aprobadas en la etapa del PP, como el refuerzo del inglés en la primaria, permanecerán tras la reforma. No ocurrirá así con la reválida, una de las principales novedades diseñadas por el Gobierno de José María Aznar. Ésta quedará fuera de juego y durante los dos años de suspensión se mantendrá la actual selectividad. La comisión tendrá que decidir qué sistema la sustituirá. El PSOE pretende diseñar una nueva prueba de entrada en la universidad.

La inminencia de la suspensión llevó ayer a las comunidades gobernadas por el PSOE y al Ejecutivo canario, de CC y PP, a sumarse a la iniciativa de la Generalitat catalana del lunes y anunciar que congelarán los desarrollos reglamentarios de la Ley de Calidad que tenían previsto aprobar en las próximas semanas para poner en marcha la reforma el curso que viene. Gobiernos autonómicos del PP, como el valenciano y el gallego, insistieron en que mantendrán los decretos previstos hasta que el Gobierno no suspenda oficialmente la ley.

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