Centauritos del desierto
Tampoco nos engañemos. Desapariciones no es ni tan mala como contaban algunas crónicas de Berlín, ni tan buena como para participar en una sección oficial de un certamen de prestigio. Desapariciones tiene todas las características del cine de Howard, presididas por la corrección y la impersonalidad, por el continuo navegar entre dos aguas. El filme tiene una buena factura y una excelente dirección de actores (Cate Blanchett está tan bien como siempre). También está claro que, como buen niño prodigio de la interpretación que fue, Howard sabe elegir y conducir a las dos crías prota...
Tampoco nos engañemos. Desapariciones no es ni tan mala como contaban algunas crónicas de Berlín, ni tan buena como para participar en una sección oficial de un certamen de prestigio. Desapariciones tiene todas las características del cine de Howard, presididas por la corrección y la impersonalidad, por el continuo navegar entre dos aguas. El filme tiene una buena factura y una excelente dirección de actores (Cate Blanchett está tan bien como siempre). También está claro que, como buen niño prodigio de la interpretación que fue, Howard sabe elegir y conducir a las dos crías protagonistas (Evan Rachel Wood y Jenna Boyd) para crear momentos de cierta congoja.
DESAPARICIONES
Dirección: Ron Howard. Intérpretes: Cate Blanchett, Tommy Lee Jones, Jenna Boyd, Evan Rachel Wood. Género: western. EE UU, 2003. Duración: 137 minutos.
Su dirección deambula entre la suciedad del western crepuscular y el clasicismo del western espectáculo. La mezcla acaba con una película que, por otro lado, produce una sensación de excesivo metraje debido a la existencia de dos finales: uno, el que debería haberse convertido en desenlace, a una media hora de sus 137 minutos, y el de verdad, que nada aporta a lo que podría haber ocurrido un buen rato antes.