OPINIÓN DEL LECTOR

Una de cal y otra de arena

El 25 de febrero publicaron una información titulada El Consell alerta a siete ciudades del peligro para su pequeño comercio. Mi carta no pretende ser un alegato contra la política del Consell, a pesar de que hay argumentos. Por una vez estoy de acuerdo, en parte, con la actitud del Gobierno. La Dirección General de Comercio ha destinado un plan de ayuda para la modernización y mejora de la competitividad de los comercios de dichas localidades. ¡Bien! Creo que la mejor forma de adaptarse al libre mercado pasa por la vía de la optimización de la oferta. Y si para ello a los comerciantes ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El 25 de febrero publicaron una información titulada El Consell alerta a siete ciudades del peligro para su pequeño comercio. Mi carta no pretende ser un alegato contra la política del Consell, a pesar de que hay argumentos. Por una vez estoy de acuerdo, en parte, con la actitud del Gobierno. La Dirección General de Comercio ha destinado un plan de ayuda para la modernización y mejora de la competitividad de los comercios de dichas localidades. ¡Bien! Creo que la mejor forma de adaptarse al libre mercado pasa por la vía de la optimización de la oferta. Y si para ello a los comerciantes les hace falta un ayudita de la Administración, ¡bienvenida sea! Porque los beneficiarios serán los consumidores. Ésa es la de cal.

La de arena viene con la voz de alerta que desde la Consejería advierte del peligro que corre el comercio tradicional por la implantación de grandes superficies. Suena a tremendismo. Según Carlos Mazón, la apuesta de la Generalitat por el pequeño comercio es una prioridad. De acuerdo, pero también debería serlo el que decenas de miles de valencianos tengamos la posibilidad de elegir cuándo y dónde queremos comprar, porque no todos tenemos la misma disponibilidad para hacerlo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En