OPINIÓN DEL LECTOR

Mentiras

Los inspectores dijeron que no había constancia de armas. Los servicios secretos dijeron a sus jefes que tal vez hubiera armas, pero no lo sabían a ciencia cierta. Los jefes dijeron a sus presidentes que era posible que hubiera armas. Los presidentes dijeron a su amigo Ansar que era probable que hubiera armas. Y finalmente nuestro presidente nos dijo que lo de las armas era seguro. Sería irrisorio si no fuera tan trágico. Ahora ya sabemos cuánto de verdad encerraba aquella afirmación, y es que las mentiras, tarde o temprano terminan por salir a la luz. Queda la duda de si mintió por ign...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Los inspectores dijeron que no había constancia de armas. Los servicios secretos dijeron a sus jefes que tal vez hubiera armas, pero no lo sabían a ciencia cierta. Los jefes dijeron a sus presidentes que era posible que hubiera armas. Los presidentes dijeron a su amigo Ansar que era probable que hubiera armas. Y finalmente nuestro presidente nos dijo que lo de las armas era seguro. Sería irrisorio si no fuera tan trágico. Ahora ya sabemos cuánto de verdad encerraba aquella afirmación, y es que las mentiras, tarde o temprano terminan por salir a la luz. Queda la duda de si mintió por ignorancia o lo hizo con alevosía. Lo más probable es que creyó lo que quería creer.

La campaña electoral es propicia para las mentiras, y entre tantas, ésta podría pasar desapercibida, pero conviene que no la olvidemos, ya que no es una mentira cualquiera. A los ciudadanos nos queda también el derecho a creer lo que queramos, y por mucho que repitan que más vale malo conocido que bueno por conocer, yo no lo creo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En