El Gobierno y las compañías pactan 'atenuar' el redondeo en las tarifas

El Gobierno quiere acallar el malestar que ha levantado la queja del Defensor del Pueblo sobre la práctica del redondeo (cobro del primer minuto entero aunque la llamada dure menos) que realizan las compañías de telefonía y, en particular, las de móviles.

Representantes de los Ministerios de Sanidad y Consumo y de Ciencia y Tecnología mantuvieron ayer una reunión con las compañías. De la cita no salió ningún compromiso concreto, pero se acordó crear dos grupos de trabajo que "garanticen que los precios sean reflejo del servicio realmente prestado al usuario, evitando fórmulas de redonde...

El Gobierno quiere acallar el malestar que ha levantado la queja del Defensor del Pueblo sobre la práctica del redondeo (cobro del primer minuto entero aunque la llamada dure menos) que realizan las compañías de telefonía y, en particular, las de móviles.

Representantes de los Ministerios de Sanidad y Consumo y de Ciencia y Tecnología mantuvieron ayer una reunión con las compañías. De la cita no salió ningún compromiso concreto, pero se acordó crear dos grupos de trabajo que "garanticen que los precios sean reflejo del servicio realmente prestado al usuario, evitando fórmulas de redondeo siempre al alza". Además se pretende introducir una mayor transparencia en los precios, intentando definir un elemento referencial común, al estilo del TAE en los créditos hipotecarios, al que se traduzcan todas las diversas ofertas de precios disponibles en el mercado.

No obstante, las compañías, como Telefónica Móviles, ya han advertido de que, si se prohíbe el redondeo, deberá compensarse mediante otros mecanismos como el aumento del precio por segundo o la reinstauración de una cuota mensual.

Asociaciones de consumidores como Facua, Ceaccu y OCU mostraron su satisfacción por el anuncio del Gobierno de abordar el tema, aunque exigen que se les incluya en las negociaciones. Facua, que ha denunciado este problema ante las autoridades de Consumo, ha recordado que esta práctica ha sido prohibida en las tarifas de interconexión que se cobran las compañías entre sí, por lo que no se debería permitir tampoco para el consumidor final.