Reportaje:

La alhóndiga de la cultura

El Corral del Carbón, un monumento nazarí que fue patio de comedias, ofrece teatro del Siglo de Oro y flamenco

Muchos siglos después, el Corral del Carbón, en Granada, vuelve a ser lo que fue alguna vez: un corral de comedias con toda la sustancia de las obras de teatro del Siglo de Oro, un rincón que devuelve a la ciudad a sus épocas de mayor esplendor y un pequeño refugio en los meses de verano para el público ávido de cultura, flamenco o entretenimiento. Mientras los habitantes de Granada huyen en masa hacia la playa y la ciudad queda desierta, el Corral del Carbón, uno de los monumentos más entrañables de Al-Ándalus, se convierte en un escenario en el que, de lunes a viernes, se puede asistir a esp...

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Muchos siglos después, el Corral del Carbón, en Granada, vuelve a ser lo que fue alguna vez: un corral de comedias con toda la sustancia de las obras de teatro del Siglo de Oro, un rincón que devuelve a la ciudad a sus épocas de mayor esplendor y un pequeño refugio en los meses de verano para el público ávido de cultura, flamenco o entretenimiento. Mientras los habitantes de Granada huyen en masa hacia la playa y la ciudad queda desierta, el Corral del Carbón, uno de los monumentos más entrañables de Al-Ándalus, se convierte en un escenario en el que, de lunes a viernes, se puede asistir a espectáculos teatrales o flamencos. Es otra Granada diferente.

"Es como entrar en otra dimensión", afirma el actor Pepe Cantero, protagonista de dos de los montajes y uno de los principales impulsores de la recuperación del Corral del Carbón como espacio cultural para el teatro. "Nuestra idea era, precisamente, acercar al público a cómo era el teatro y qué se hacía en el teatro en los siglos XVI y XVII, y el lugar es único para ello".

El Corral del Carbón, situado a espaldas del Ayuntamiento, es, ciertamente, el único edificio de sus características que existe hoy en España. Construido en el siglo XIV, en la época de mayor esplendor de Al-Ándalus, fue una alhóndiga, es decir, una fonda que albergaba a los comerciantes que llegaban a la ciudad con sus productos para vender. Su patio central y sus tres plantas se encuentran hoy entre los monumentos mejor conservados del legado musulmán.

En el siglo XVI pasó a ser un corral de comedias y en el siglo XVII se convirtió en una casa de vecinos. A comienzos del siglo XX estaba absolutamente degradado. El arquitecto Leopoldo Torres Balbás, el gran restaurador de la Alhambra, se encargó de recuperarlo.Hoy continúa siendo uno de esos rincones alhambreños que se encuentran fuera de la ciudadela nazarí, pero que conservan sus mismas características. Para muchos turistas, pasa desapercibido. Por eso algunas instituciones decidieron unirse hace unos años y darle, durante los meses de verano, su condición de espacio cultural.

Entremeses en el centro

En los últimos cinco años, se ha convertido en uno de los pocos lugares de Granada que en agosto mantienen una actividad permanente, el ciclo conocido como Los veranos del Corral, que se celebra del 16 de julio al 2 de septiembre.

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"El público está muy cerca del espectáculo. Las obras que se representan se aprovechan de la propia escenografía del recinto, de la fuente del patio, de las tres plantas que lo rodean. Es un lugar que está muy céntrico, y es muy accesible. La mayoría de los turistas que acuden en agosto a Granada son nacionales y lo hacen por interés cultural. De pronto pasan delante del Corral del Carbón y ven que entre las diez y media y las once y media de la noche pueden ver una obra de teatro... es atractivo", explica Pepe Cantero.

El director del ciclo de teatro, Miguel Serrano, ha escogido para este año dos obras diferentes, una que se representa los lunes y otra los martes: Los entremeses de Juan Rana, de Luis Quiñones de Benavente, uno de los grandes maestros del Siglo de Oro, y La zapatera prodigiosa. de Federico García Lorca. "Los entremeses de Juan Rana es un montaje ideal para el sitio en que se hace", explica Cantero. "En el siglo XVII había un cómico muy famoso, Cosme Pérez, que creó un personaje que le acompañó toda su vida, Juan Rana. Para ese personaje muchos autores escribieron algunos entremeses. Quiñones de Benavente fue uno de ellos", añade.

Ver una obra del Siglo de Oro en un recinto que en su día fue corral de comedias es llevar al espectador a otro tiempo, a otro mundo. De ahí el éxito que está teniendo el espectáculo. El flamenco se convierte en el eje de la programación los miércoles, los jueves y los viernes. Este año se celebra la Quinta Muestra Andaluza de Jóvenes Valores del Baile Flamenco, en la que artistas noveles del baile, el cante y la guitarra se dan a conocer en público. Ya en anteriores ocasiones ha habido sorpresas con intérpretes que, tras pasar por el Corral del Carbón, entraron en los grandes circuitos del flamenco. Los viernes se dedican al ciclo Guitarras en Concierto y Voces Flamencas, centrados en el toque y en el cante. Así, sin solución de continuidad, el Corral del Carbón pasa de ser el mundo del siglo XVII al mundo ancestral del flamenco. Un mundo sin tiempo.

Lugar: Corral del Carbón. Calle Mariana Pineda 12. Granada. Reservas: 902 100 095. Hora: 22.30. Precio: 12 euros. De lunes a viernes. Otros: Casa de la Memoria. Calle Ximenez de Enciso, 28. Sevilla. 954 56 06 70. Castillo de San Marcos. El Puerto de Santa María (Cádiz). 956 85 17 51.

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