El Parlamento celebrará un acto anual de homenaje a las víctimas
El Parlamento aprobará antes del verano una primera batería de medidas de apoyo a las víctimas del terrorismo, consensuadas por los partidos del Gobierno (PNV, EA e IU) y el PP y el PSE, según se decidió ayer en la ponencia creada al efecto dentro de la Comisión de Derechos Humanos. Aunque la ponencia sólo cuenta con un dictamen provisional y no tendrá el definitivo hasta fin de año, los grupos coinciden ya en algunas medidas, entre las que se encuentra la de dedicar una jornada anual a la memoria de las víctimas, la colocación de un un monolito en el Parlamento y los ayuntamientos, así como e...
El Parlamento aprobará antes del verano una primera batería de medidas de apoyo a las víctimas del terrorismo, consensuadas por los partidos del Gobierno (PNV, EA e IU) y el PP y el PSE, según se decidió ayer en la ponencia creada al efecto dentro de la Comisión de Derechos Humanos. Aunque la ponencia sólo cuenta con un dictamen provisional y no tendrá el definitivo hasta fin de año, los grupos coinciden ya en algunas medidas, entre las que se encuentra la de dedicar una jornada anual a la memoria de las víctimas, la colocación de un un monolito en el Parlamento y los ayuntamientos, así como el establecimiento, con carácter permanente, de una subcomisión parlamentaria para la interlocución con ellas. Además se prevé un plan interdepartamental para educar en valores de paz, se impulsarán los foros cívicos locales previstos en el acuerdo de Eudel y se acompañará a los familiares en los tribunales.
El PP y el PSE tienen planteadas medidas adicionales por consensuar. Los populares piden una campaña del Gobierno para inducir la implicación ciudadana en la lucha contra el terrorismo, mientras el PSE quiere que EITB adopte en sus medios una línea editorial de clara beligerancia contra ETA y que programe espacios de reflexión y debate sobre el terrorismo.
La ponencia se volverá a reunir a medidados de junio para cerrar un nuevo calendario de comparecencias, que iniciarán asociaciones empresariales y sindicatos, seguidos, ya después del verano, por la Iglesia, la Justicia, los medios de comunicación y colectivos pacifistas y de apoyo a las víctimas.