EL ANÁLISIS ELECTORAL

Los socialistas se aseguran 21 diputaciones provinciales frente a 19 del Partido Popular

Las de Teruel, Girona, Álava y el Consejo Insular de Mallorca quedan pendientes de los pactos

El empate a 20 que el PP y el PSOE sostenían en las diputaciones desde 1999 se ha saldado con una ligera ventaja a favor de los socialistas tras las elecciones del domingo. El PSOE gana dos diputaciones que pierde el PP: Toledo y A Coruña, esta última con pactos con el Bloque Nacionalista Galego. A su vez, el PP recupera Ibiza-Formentera a costa del PSOE. Con ello, el PSOE se sitúa en 21 y el PP en 19. Otras están a expensas de pactos: Teruel, que la puede mantener el PAR o ganarla el PSOE; Girona, que era de CiU y puede ser del PSC o de ERC, y Álava, que la disputan PP y PSOE.

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El empate a 20 que el PP y el PSOE sostenían en las diputaciones desde 1999 se ha saldado con una ligera ventaja a favor de los socialistas tras las elecciones del domingo. El PSOE gana dos diputaciones que pierde el PP: Toledo y A Coruña, esta última con pactos con el Bloque Nacionalista Galego. A su vez, el PP recupera Ibiza-Formentera a costa del PSOE. Con ello, el PSOE se sitúa en 21 y el PP en 19. Otras están a expensas de pactos: Teruel, que la puede mantener el PAR o ganarla el PSOE; Girona, que era de CiU y puede ser del PSC o de ERC, y Álava, que la disputan PP y PSOE.

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Los populares han gobernado desde 1999 en 20 de las 51 diputaciones provinciales: Alicante, Almería, Avila, Burgos, Castellón, A Coruña, León, Lugo, Ourense, Palencia, Pontevedra, Salamanca, Segovia, Soria, Toledo, Valencia, Valladolid, Zamora, la Diputación Foral de Alava y el Cabildo de Gran Canaria.

A su vez, los socialistas han gobernado en estos últimos cuatro años en otras 20: Albacete, Badajoz, Barcelona, Cáceres, Cádiz, Ciudad Real, Córdoba, Cuenca, Granada, Guadalajara, Huelva, Huesca, Jaén, Málaga, Sevilla, Zaragoza, los cabildos insulares de La Gomera y Lanzarote y los consejos insulares de Ibiza-Formentera y Menorca.

Las 11 diputaciones restantes se repartieron en 1999 entre nacionalistas y regionalistas del siguiente modo: Girona, Lleida y Tarragona para CiU; los Cabildos insulares de Fuerteventura, La Palma y Tenerife para Coalición Canaria; las Diputaciones Forales de Guipúzcoa y Vizcaya para el PNV; la de Teruel para el PAR (Partido Aragonés); el Consejo Insular de Mallorca para Unión Mallorquina (UM) y el Cabildo Insular de El Hierro para la Agrupación Herreña Independiente.

En las elecciones del pasado domingo, el PP perdió las diputaciones de Toledo y A Coruña a favor del PSOE. En el primer caso, el PP bajó de 14 a 12 diputados provinciales y el PSOE subió de 13 a 15. En A Coruña, el PP bajó de 16 a 15, mientras la suma del PSOE y del Bloque Nacionalista Galego se sitúa en 16 diputados provinciales.

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A su vez, el PP recupera Ibiza-Formentera, en Baleares, a costa del PSOE. Estos primeros datos sitúan al PSOE al frente de 21 diputaciones provinciales y al PP, de 19.

Sin embargo, quedan aún pendientes de decidir por los pactos, al menos, las siguientes diputaciones: Teruel, Girona, Álava y el Consejo Insular de Mallorca.

En Teruel gobernaba desde 1999 el PAR (Partido Aragonés) con el apoyo del PSOE, con 7 diputados provinciales cada partido. Pero el domingo, el PSOE se situó como primera fuerza política al pasar de 7 a 10 diputados mientras el PAR bajaba de 7 a 5. Teruel puede pasar, previsiblemente, a manos del PSOE, pero no es definitivo hasta que socialistas y regionalistas aragoneses cierren los pactos en esa provincia, que además de la Diputación afectan a varios ayuntamientos.

Girona, que estaba gobernada por CiU desde 1999, será gobernada en esta legislatura por el PSC o por Esquerra Republicana de Catalunya (ERC). CiU bajó el domingo de 15 a 12 diputados provinciales y el PSC de 10 a 9. La llave de la gobernabilidad la tiene ERC, a la que se le presentan dos posibilidades: atender la oferta de CiU, que le ofrece la presidencia de la Diputación a cambio de un pacto más amplio, o mantener el acuerdo con el PSC, que daría la gobernación a los socialistas.

En Álava, la disputa se plantea entre el PP y el PSOE. En 1999, el PP fue la primera fuerza política y los socialistas le dieron la mayoría absoluta para que gobernase establemente, en coherencia con los pactos entre partidos constitucionalistas frente al soberanismo nacionalista que proliferaron en la comunidad vasca.

Sin embargo, el domingo el PNV fue la fuerza más votada en Álava. Por ello, los socialistas reclaman la diputación alavesa al PP, que ahora es la segunda fuerza política, a cambio del apoyo que le darán a los populares para que mantengan la alcaldía de la capital alavesa, Vitoria.

En cuanto al Consejo Insular de Mallorca también queda a expensas de los pactos en Baleares. Lo gobernó la Unión Mallorquina en la última legislatura. El PSOE fue el partido más votado el domingo, pero todo queda a expensas de posibles acuerdos con la citada formación política.

A su vez, CiU se asegura Lleida y Tarragona; el PNV, Vizcaya y Guipúzcoa, y Coalición Canaria se reafirma en los cabildos de Fuerteventura, La Palma, Tenerife y El Hierro.

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