Amigos del Centro Histórico denuncia la "agresión" al patrimonio
La asociación cuenta 700 "ofensas" en actuaciones en la Ciutat Vella de Valencia
La Asociación Amigos del Centro Histórico (Asach) ha hecho recuento de las "agresiones" que en su opinión ha sufrido el patrimonio del casco antiguo de Valencia, y llega a una lista de 700 actuaciones perjudiciales en cuatro años. Asach "quiere desenmascarar a la Generalitat y el Ayuntamiento" porque "simulan" conservar el patrimonio "cuando lo cierto es que lo destrozan sistemáticamente".
La entidad ha denunciado en estos últimos años más de 100 actuaciones en el centro histórico, entre ellas, la restauración de la cúpula de la Basílica de la Virgen por innecesaria -los informes oficia...
La Asociación Amigos del Centro Histórico (Asach) ha hecho recuento de las "agresiones" que en su opinión ha sufrido el patrimonio del casco antiguo de Valencia, y llega a una lista de 700 actuaciones perjudiciales en cuatro años. Asach "quiere desenmascarar a la Generalitat y el Ayuntamiento" porque "simulan" conservar el patrimonio "cuando lo cierto es que lo destrozan sistemáticamente".
La entidad ha denunciado en estos últimos años más de 100 actuaciones en el centro histórico, entre ellas, la restauración de la cúpula de la Basílica de la Virgen por innecesaria -los informes oficiales "demuestran la inmejorable salud" de la estructura- o la destrucción de las pinturas del siglo XVIII de José Vergara en la Capilla del Escalante, que ha acabado en condena a la Diputación de Valencia.
Pero las "constantes ofensas realizadas o consentidas por la Administración" en el centro histórico son muchas más, según la asociación, que advierte de que "el corazón de Valencia desaparecerá irremisiblemente" si los atropellos continúan. Así, Asach afirma que en los últimos cuatro años "se han demolido 250 edificios en Velluters" y se han ensanchado 30 de sus calles "desfigurando un trazado singular". Este tipo de actuaciones está prevista en planes especiales de Ciutat Vella aún por ejecutar y que abren "plazas donde nunca las hubo".
También recuerda la entidad que la ley obliga a rehabilitar edificios valiosos y abandonados -unos 300- como la Casa del Relojero o el Palacio de los Pascual Guillem.
Además de la actuación en el entorno de la muralla árabe -"un capricho arquitectónico"-, la Asach denuncia que "la demolición total o parcial de edificios protegidos se acelera alarmantemente" y que se desprotegen inmuebles "sin contemplaciones". Las construcciones "inarmónicas", el abandono de los restos de L'Almoina, los lucernarios que coronan patios de edificios históricos, pintadas en El Micalet, la "escasa calidad" del mobiliario urbano, los carteles publicitarios sobre inmuebles protegidos o los pavimentos "mal ejecutados"..., la lista de ejemplos es larga.
Según la asociación, la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia han atendido un 10% o 15% de sus denuncias, pero "engaña a los valencianos simulando conservar el patrimonio".