La protección policial evita incidentes en la salida vacacional en autobuses

Compañías de autocares vendieron ayer más billetes que plazas disponibles en Bilbao

El dispositivo montado por el Departamento de Interior evitó incidentes en el primer día de la masiva salida vacacional en autobuses, el sector que está en huelga desde hace un mes en Vizcaya. Tanto los trayectos desde la estación central de Bilbao como desde Guipúzcoa y Álava -donde muchas agencias de viajes han desviado a sus clientes por el paro- se desarrollaron con normalidad, según confirmaron tanto Interior como los empresarios y trabajadores. "No ha habido ningún problema", señaló un portavoz de la consejería.

Únicamente hubo momentos de tensión en la estación central de autobus...

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El dispositivo montado por el Departamento de Interior evitó incidentes en el primer día de la masiva salida vacacional en autobuses, el sector que está en huelga desde hace un mes en Vizcaya. Tanto los trayectos desde la estación central de Bilbao como desde Guipúzcoa y Álava -donde muchas agencias de viajes han desviado a sus clientes por el paro- se desarrollaron con normalidad, según confirmaron tanto Interior como los empresarios y trabajadores. "No ha habido ningún problema", señaló un portavoz de la consejería.

Únicamente hubo momentos de tensión en la estación central de autobuses de Bilbao, donde algunas compañías vendieron más billetes que los establecidos en los servicios mínimos, lo que dejó sin viaje a varias decenas de personas. La patronal y los sindicatos confirmaron ayer que siguen sin recibir la notificación de la reunión anunciada por el Gobierno para la próxima semana para intentar resolver la huelga.El dispositivo de la Ertzaintza volverá a implantarse el lunes, con el regreso vacacional, y consiste en la protección de los autobuses que no están en huelga con un triple objetivo anunciado por la consejería de Interior: evitar actuaciones de los llamados piquetes informativos, minimizar el riesgo de agresiones y evitar y esclarecer los incidentes. La policía vasca detuvo la semana pasada a seis personas presuntamente implicadas en los ataques.

La masiva salida vacacional de ayer era vista con preocupación por las agencias de viajes, que temían actos vandálicos contra autobuses que salieran de fuera de la provincia de Vizcaya, como ha sucedido en muchas ocasiones en este mes de huelga. Pero hasta últimas horas de la tarde de ayer no hubo agresiones, en la línea de lo ocurrido en los últimos días: desde el viernes sólo se ha registrado un ataque, que afectó a diez autobuses de un mismo empresarios.

La situación más complicada se vivió ayer en Termibus, la estación central de Bilbao, donde todos los días se concentran gran cantidad de trabajadores en huelga para controlar los servicios mínimos del 20% fijados por el Gobierno vasco. Los pasajeros se encontraron con que en algunas líneas, como la Irún-Oviedo o la Santander-Zaragoza, se habían vendido más billetes que los que permitían los servicios mínimos, por lo que varias decenas de personas se quedaron sin autobús. En algunos casos las compañía devolvieron el dinero a los afectados o se fletaron taxis para desplazarlos a Vitoria.

Esta actuación soliviantó a los trabajadores, que incluso realizaron una colecta para una mujer que tenía que viajar con urgencia a Zaragoza y a la que la empresa no le abonó el taxi tras quedarse sin plaza. Como no se consiguió reunir el dinero suficiente, uno de los huelguistas se encargó de llevarla en su vehículo.

Pedro Angulo, portavoz de UGT, culpó a las empresas de provocar estos incidentes, con la intención de que el Gobierno dicte un laudo de obligado cumplimiento para resolver la huelga, una petición que ha reiterado la patronal desde el principio del conflicto. Angulo criticó que habían salido dos autocares que no formaban parte de los servicios mínimos. "Había otros que se han ido de vacío porque lo hemos denunciado", dijo. Los sindicatos reiteraron que los autobuses que han partido de Guipúzcoa y Álava con usuarios vizcaínos han cometido un "esquirolaje a la huelga" y criticaron que salgan escoltados por la Ertzaintza. "Eso es proteger al delincuente".

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Pérdidas económicas

Esta huelga, que ha dejado sin transporte escolar a 38.000 niños y sin medio de locomoción a miles de trabajadores que van a sus fábricas en autocares, está provocando pérdidas millonarias. La patronal ha afirmado que sólo en los 200 ataques a vehículos los daños rondan el millón de euros.

Las agencias de viaje, que tienen en la Semana Santa una de sus principales fuentes de negocio, han visto cancelados más del 20% de desplazamientos previstos, según coinciden varias compañías consultadas.

Viajes Ecuador asegura que no ha tenido que anular reservas porque, "en general, el cliente ha aceptado no poder salir de Bilbao", asegura un encargado, quien admite que se han reducido las ventas respecto al pasado año "entre un 10% y un 20%". Viajes Marsans ha recurrido a San Sebastián y Vitoria para las salidas de sus clientes y calcula que ha tenido entre "un 15% y un 20%" de cancelaciones. "A eso le añades los que no han venido y se supera el 20%", señaló un portavoz.

Añadió que la huelga ha reducido los márgenes de beneficio porque el incremento de los costes ya que compañías de autobuses de otras provincias "han aprovechado para subir los precios. Y eso no lo puedes repercutir al cliente". Viajes Eroski estima que un 20% de clientes ha cancelado sus viajes y otro 25% ha desistido de ir en autobús y ha utilizado sus propios medios.

Conductores de autobuses en huelga recogen dinero en la estación de Bilbao para pagar un taxi a una mujer (a la izquierda) que se quedó sin billete.TXETXU BERRUEZO

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