Francia envía otros 400 soldados a Costa de Marfil para proteger a sus civiles

París confirmó ayer haber enviado 400 militares más a Costa de Marfil "para garantizar la seguridad de los ciudadanos franceses", unos 12.000 civiles. En la actualidad el número de militares franceses presente en el país africano ronda los 3.300.

Por su parte, el presidente Laurent Gbagbo ha vuelto a aplazar su mensaje televisivo a la población de Costa de Marfil. Mientras su esposa, la diputada Simone Gbagbo, ya ha dicho que "los acuerdos de Marcoussis son un problema y lo mejor es olvidarse de ellos", el presidente no ha querido que sus compatriotas oigan lo que dijo en París, donde a...

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París confirmó ayer haber enviado 400 militares más a Costa de Marfil "para garantizar la seguridad de los ciudadanos franceses", unos 12.000 civiles. En la actualidad el número de militares franceses presente en el país africano ronda los 3.300.

Por su parte, el presidente Laurent Gbagbo ha vuelto a aplazar su mensaje televisivo a la población de Costa de Marfil. Mientras su esposa, la diputada Simone Gbagbo, ya ha dicho que "los acuerdos de Marcoussis son un problema y lo mejor es olvidarse de ellos", el presidente no ha querido que sus compatriotas oigan lo que dijo en París, donde admitió el 25 de enero "no haber ganado la guerra y estar obligado a aceptar compromisos".

En Francia, el ministro de Exteriores, Dominique de Villepin, habría presentado la dimisión el 29 de enero al presidente Jacques Chirac, quien la rechazó. La información procede del semanario Le canard enchaîné. El gesto de Villepin sería el resultado tanto de las críticas contra su gestión de la crisis como de la evidencia de su incapacidad para hacer respetar los acuerdos que debían desembocar en un "Gobierno de reconciliación nacional". El socialista François Hollande calificó de "inaplicables" los acuerdos de Marcoussis porque "¿cómo pueden comprender los habitantes del país que hay que conceder las carteras de Defensa e Interior a responsables de una rebelión armada?". Otro socialista, Dominique Strauss-Kahn, ha hablado de "formidable fracaso de la diplomacia francesa", mientras el soberanista conservador Philippe de Villiers denunció "la actitud contradictoria" que lleva a "defender a Gbagbo en Costa de Marfil mientras en París damos la razón a los rebeldes".

El Consejo de Seguridad de la ONU ha dado su respaldo a las iniciativas de Villepin autorizando, gracias a la resolución 1.464, a "las fuerzas francesas a asumir la protección de civiles" sin perjuicio "de las responsabilidades del Gobierno de reconciliación nacional".

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