El fiscal quiere imputar al capitán del barco asaltado por Greenpeace

El 'Vemamagna' es sospechoso de un vertido de agosto de 2002

La Fiscalía de Cádiz propuso el pasado 22 de enero la imputación del capitán del petrolero Vemamagna, que fue asaltado por miembros de Greenpeace dos días antes, el lunes 20. El fiscal de Medio Ambiente quiere que el capitán declare como imputado ante el juez por un vertido ocurrido el 31 de agosto del año pasado y que afectó a la playa de poniente de la Línea de la Concepción. La denuncia fue presentada por los ecologistas de Agaden.

La Fiscalía de Cádiz ha enviado un escrito a los juzgados de La Línea para que abra diligencias en relación a la denuncia presentada por los ecolog...

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La Fiscalía de Cádiz propuso el pasado 22 de enero la imputación del capitán del petrolero Vemamagna, que fue asaltado por miembros de Greenpeace dos días antes, el lunes 20. El fiscal de Medio Ambiente quiere que el capitán declare como imputado ante el juez por un vertido ocurrido el 31 de agosto del año pasado y que afectó a la playa de poniente de la Línea de la Concepción. La denuncia fue presentada por los ecologistas de Agaden.

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La Fiscalía de Cádiz ha enviado un escrito a los juzgados de La Línea para que abra diligencias en relación a la denuncia presentada por los ecologistas de Agaden como consecuencia del vertido ocurrido en agosto de 2002 en la bahía de Algeciras.

Según fuentes del grupo ecologista, el fiscal pide que se cite como imputados a los capitanes de los dos buques presuntamente implicados en la contaminación (el Vemamagna y el Dibulti). También pide que la facultad de Ciencias del Mar de Cádiz elabore un informe sobre los daños provocados por esta contaminación de hidrocarburos.

Este vertido se produjo, supuestamente, cuando el Vemamagna suministraba combustible a la otra embarcación. El Vemamagna, de bandera maltesa, es un petrolero monocasco que suministra combustible, de forma habitual, a otros buques en aguas de la bahía de Algeciras.

El petrolero permanece fondeado desde hace meses en aguas de la bahía, donde actúa, gracias a la impunidad de las autoridades de Gibraltar, como gasolinera flotante. Fue éste el motivo por el que el grupo ecologista Greenpeace organizó el pasado lunes un acto de protesta que terminó con la detención, por parte de la policía gibraltareña, de seis ecologistas y 14 periodistas.

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El vertido ocurrido en agosto causó una mancha de fuel de unos 900 metros de longitud por 500 de anchura y afectó a las zonas de Guadarranque, en San Roque, y sobre todo a la playa de Poniente en La Línea, desde la zona de la escollera, donde incluso tuvo que prohibirse el baño dos días.

Martín Caballero, portavoz de Agaden, valoró ayer la decisión del fiscal: "Han sido numerosas las ocasiones en las que hemos dicho desde nuestra asociación que la problemática de los vertidos en la bahía de Algeciras no se terminará mientras no intervenga la justicia". "Esperamos que en este asunto se llegue hasta el final", añadió el dirigente ecologista.

El grupo ecologista Agaden confía en que la fiscalía y los juzgados actuén también de la misma manera en otras seis denuncias por delitos ecológicos que ha presentado. También confía en que esta medida sirva para "tranquilizar" a los vecinos del Campo de Gibraltar tras la "alarma" causada por el hundimiento de la gabarra Spabunker IV, el pasado martes, con 1.374 toneladas de combustible.

Precisamente, la Capitanía Marítima aseguró ayer que la situación sobre esta embarcación está "normalizada", informa Efe. Según Capitanía, sigue sin haber indicios hasta el momento de vertidos procedentes del combustible almacenado en la gabarra, hundida a 50 metros de profundidad. El equipo técnico desplazado a la zona trabaja en la fase preliminar de la extracción del fuel, que podría empezar esta semana, y el posterior reflote de la nave.

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