Los GEO apresan a una banda que asaltaba chalés

Tres pisos en Usera y Tarancón (Cuenca) eran la base de operaciones de una peligrosa banda de ladrones de chalés, formada por nueve inmigrantes colombianos. Sus integrantes no dudaban en emplear una gran violencia con sus moradores para conseguir el mayor botín posible. Les atemorizaban, le pegaban y, si lo creían necesario, los encerraban en alguna habitación hasta que desvalijaban la vivienda. Para detenerlos, fue necesario la intervención de los Grupos Especiales de Operaciones (GEO), según la Jefatura Superior de Policía.

Los investigadores del Grupo de Crimen Organizado de la Polic...

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Tres pisos en Usera y Tarancón (Cuenca) eran la base de operaciones de una peligrosa banda de ladrones de chalés, formada por nueve inmigrantes colombianos. Sus integrantes no dudaban en emplear una gran violencia con sus moradores para conseguir el mayor botín posible. Les atemorizaban, le pegaban y, si lo creían necesario, los encerraban en alguna habitación hasta que desvalijaban la vivienda. Para detenerlos, fue necesario la intervención de los Grupos Especiales de Operaciones (GEO), según la Jefatura Superior de Policía.

Los investigadores del Grupo de Crimen Organizado de la Policía Judicial iniciaron sus pesquisas hace más de siete meses, al detectar un notable incremento de los robos en chalés por personas suramericanas que empleaban gran violencia en sus asaltos. No dudaban en empuñar armas de fuego o blancas para intimidar a sus víctimas.

En una ocasión entraron en un chalé y no les amedrentó que se encontrara sola una niña de diez años. La rodearon mientras veía la televisión y la sometieron a un duro interrogatorio para averiguar en qué lugar se guardaban los objetos de valor. Después la ataron de pies y manos en el sótano hasta que fue encontrada por sus padres. Otra vez, irrumpieron en otra vivienda donde estaba un menor con sus amigos. A punta de pistola y con gran rudeza encerraron a todos en una habitación.

Siempre cubrían sus caras con pasamontañas y usaban guantes. Además, cambiaban constantemente de lugar de residencia y de provincia para no ser localizados. Para sus robos elegían municipios de la periferia, con buenas vías de comunicación por las que huir. En especial, robaban en urbanizaciones de Las rozas, Pozuelo, Majadahonda y Alcobendas.

Los pisos de la banda se hallaban en las calles del Olvido y Dolores Barranco, en el distrito de Usera, y en la calle del Archivero Dimas Pérez, en Tarancón. De forma coordinada, los geo entraron en las tres viviendas a la misma hora y lograron arrestar a los nueve integrantes de la banda. Tres tienen antecedentes por robos.

Los registros de los pisos han permitido recuperar gran cantidad de joyas, armas blancas, dos pistolas, caretas, guantes y efectos procedentes de robos. La policía les imputa hasta ahora diez asaltos, pero cree que han cometido más. La Jefatura Superior de Policía de Madrid (calle del Doctor Federico Rubio y Gali, 55) expone desde hoy el material incautado para que quienes hayan sufrido un robo se pasen por allí y puedan reconocer sus objetos.

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