Rusia no apoya un nuevo texto de la ONU sobre Bagdad

Rusia se felicitó ayer por la decisión de Irak de permitir el regreso incondicional de los inspectores internacionales a ese país, al tiempo que dejó ver que no apoyará ni una nueva resolución del Consejo de Seguridad ni, menos aún, el empleo 'automático' de la fuerza contra el régimen de Sadam Husein.

'El rápido comienzo de las inspecciones en Irak constituirá el primer paso importante para la solución global, promovida por Rusia, del problema iraquí', solución que pasa por 'el respeto a la soberanía e integridad territorial' de ese país, asegura el Ministerio de Exteriores ruso, en un...

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Rusia se felicitó ayer por la decisión de Irak de permitir el regreso incondicional de los inspectores internacionales a ese país, al tiempo que dejó ver que no apoyará ni una nueva resolución del Consejo de Seguridad ni, menos aún, el empleo 'automático' de la fuerza contra el régimen de Sadam Husein.

'El rápido comienzo de las inspecciones en Irak constituirá el primer paso importante para la solución global, promovida por Rusia, del problema iraquí', solución que pasa por 'el respeto a la soberanía e integridad territorial' de ese país, asegura el Ministerio de Exteriores ruso, en un comunicado divulgado con motivo de la carta en la que Bagdad anuncia que permite el retorno de los inspectores.

Pero el Kremlin siempre ha abogado por que la misión de esos inspectores tenga un plazo concreto en el cual deben determinar si Irak tiene o está creando armas de exterminio masivo. En caso de que ellos no determinen su existencia, la comunidad internacional debería levantar las sanciones económicas contra el régimen de Husein. Esta idea también se refleja en la declaración rusa, que afirma que la decisión de Bagdad y la vuelta de los inspectores 'abre la vía para levantar las sanciones que pesan sobre Irak'. 'Rusia actuará enérgicamente para que no se desaproveche esta oportunidad real' de llegar a una solución política y no militar, alejando la posibilidad de un ataque contra Irak, añade el comunicado.

Gesto táctico

Por su parte el secretario de Estado adjunto norteamericano, John Wolf, declaró ayer en Bruselas tras reunirse con los embajadores de la OTAN y del Comité Político y de Seguridad de la UE que la decisión iraquí de aceptar el regreso de los inspectores de la ONU es un 'simple gesto táctico', informa Bosco Esteruelas. 'La inspección no es el final. Irak debe cumplir con todas las resoluciones de la ONU que ha violado e iniciar el desarme', dijo el alto funcionario, responsable de proliferación de armamento, quien cuestionó la sinceridad de Bagdad. 'No hay duda de que no ha hecho más que rearmarse en los últimos años', agregó el enviado norteamericano, quien pidió a los aliados mayor cooperación en la lucha contra las armas de destrucción masiva.

Para el secretario general de la OTAN, George Robertson, el gesto de Sadam permitiendo el regreso de los inspectores de la ONU es 'positivo'. 'Pero lo que cuenta realmente no es lo que hace, sino lo que dice'. Lord Robertson señaló que por el momento 'Irak no es un tema que competa a la OTAN', pero ciertamente será objeto de debate en la reunión informal que los ministros de Defensa celebrarán la semana próxima en Varsovia.

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