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La Estrella de Galicia, un rincón por descubrir llegado del norte

Con un poco de imaginación, el enclave donde se encuentra este bar restaurante gallego podría recordar algunos de los rincones más elegantes de las costas españolas. Se trata de un lugar por descubrir, oculto en un recodo del nuevo centro comercial de la Moraleja Green, al lado de un minicampo de golf y de un pequeño lago artificial en torno al cual se distribuyen varios locales desenfadados para comer. Pizza Jardín, Tony Romas y Sky Bar configuran la lista de los más fiables.

En el centro de este espacio de ocio repleto de terrazas y tapizado de hierba, situado en Alcobendas, suele act...

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Con un poco de imaginación, el enclave donde se encuentra este bar restaurante gallego podría recordar algunos de los rincones más elegantes de las costas españolas. Se trata de un lugar por descubrir, oculto en un recodo del nuevo centro comercial de la Moraleja Green, al lado de un minicampo de golf y de un pequeño lago artificial en torno al cual se distribuyen varios locales desenfadados para comer. Pizza Jardín, Tony Romas y Sky Bar configuran la lista de los más fiables.

En el centro de este espacio de ocio repleto de terrazas y tapizado de hierba, situado en Alcobendas, suele actuar sobre un escenario desmontable y sólo los fines de semana un conjunto musical, al filo de la medianoche, generalmente con derroche de decibelios. Dentro de este complejo sobresale La Estrella de Galicia, bar de diseño llegado de las tierras del norte donde se puede comer a base de tapas y de pequeñas raciones.

Cervecería La Estrella de Galicia

Avenida de Europa, 10. Centro comercial La Moraleja Green. La Moraleja, Alcobendas. Teléfono 916 618 785. No cierra. Entre 10 y 15 euros.

Por supuesto, en este bar se pueden degustar platos típicos gallegos que no son excepcionales, pero que tienen un buen nivel en relación con la moderación de sus precios. Están bien los mejillones escabechados al estilo gallego; no desmerece la tortilla enxebre, con patatas y picadillo de carne, y sería estupendo el bacalao con cachelos (patatas) si los tubérculos estuvieran bien cocidos.

Conviene probar la brocheta crujiente de pollo, muy acertada, y también los callos con garbanzos, las croquetas de lacón y las orejas de cerdo con patatas. Para rematar la comida, de postre unas filloas rellenas de queso. Y para beber, cualquiera de las cervezas de esta conocida marca gallega.

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