El inventario de bienes culturales incluirá 200 cuadros de la colección privada de la casa de Alba

La Comunidad de Madrid, a través de su Dirección General de Patrimonio, realizó este año el recuento de la colección privada de pintura del palacio de Liria. El estudio, solicitado en febrero pasado por la casa de Alba, propietaria del palacio, se hizo para incluir dicha colección en el inventario de bienes culturales de la región. Ya se ha incoado el expediente de inclusión, y ésta se hará efectiva, tras la preceptiva información pública, el próximo mes. Más de 200 obras de los siglos XVII al XIX estarán bajo la tutela y protección jurídica del Patrimonio de la Comunidad.

'Es una impor...

La Comunidad de Madrid, a través de su Dirección General de Patrimonio, realizó este año el recuento de la colección privada de pintura del palacio de Liria. El estudio, solicitado en febrero pasado por la casa de Alba, propietaria del palacio, se hizo para incluir dicha colección en el inventario de bienes culturales de la región. Ya se ha incoado el expediente de inclusión, y ésta se hará efectiva, tras la preceptiva información pública, el próximo mes. Más de 200 obras de los siglos XVII al XIX estarán bajo la tutela y protección jurídica del Patrimonio de la Comunidad.

'Es una importante colección de más de 200 obras, especialmente de los siglos XVII al XIX. La aportación más amplia es de pintura inglesa, pero también italiana, francesa, flamenca y española, incluidos lienzos de Miró y Picasso', explican fuentes de la Comunidad de Madrid.

La propia casa de Alba solicitó la realización del inventario de sus estancias privadas el pasado mes de febrero, según confirmó ayer a este periódico. 'Es un fondo muy interesante', aseguran los expertos en historia del arte que trabajan para el Gobierno regional. Los datos documentales aportados por la casa de Alba acerca de las obras de su colección facilitaron el trabajo de investigación y valoración histórica y cultural de los técnicos, según subrayó ayer el director General de Patrimonio de la Comunidad, Juan José Echevarría.

La inclusión de la colección privada de pintura del palacio de Liria en el inventario del Patrimonio Histórico de Madrid es paso previo a la declaración expresa de 'bien de interés cultural'. Aunque la denominación BIC supondría entrar en la primera división o en el ranking de lujo de obras artísticas y monumentales, la pertenencia al inventario ya implica, según los especialistas, una alta consideración, además de garantías de tutela oficial.

La ley autonómica de 9 de julio de 1998 (Ley 10/98) fija el concepto de bien cultural de la Comunidad de Madrid. El artículo 14 dispone que 'los bienes muebles e inmuebles, materiales o inmateriales del Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid que, sin tener el valor excepcional de los declarados de interés cultural, posean especial significación e importancia, serán incluidos en el Inventario de Bienes Culturales de la Comunidad de Madrid y gozarán de la protección prevista en esta Ley y en la legislación general del Estado'.

Las autoridades, en este caso las autonómicas, se convierten en protectores jurídicos de esa colección. Así, los propietarios deberán notificar cualquier traslado de las obras (para una exposición nacional o internacional o a otro domicilio particular), así como su restauración o su posible venta (en la que los organismos oficiales garantes tendrían preferencia). Por otro lado, señalan los responsables de Patrimonio, los propietarios de los bienes inventariados obtienen ventajas fiscales y también de acreditación de las obras a efectos de donación o de testamentaría.

Esta colección privada de los Alba no podrá ser contemplada, de momento, por el público. Sí pueden visitarse los jardines del palacio de Liria y la colección de arte gestionada por la Fundación casa de Alba. Es una de las más importantes de España e incluye obras de Goya, Murillo, Zurbarán, Fra Angélico, Rubens y otros grandes pintores. Este palacio de la calle de la Princesa fue construido a finales del siglo XVIII por Ventura Rodríguez.