Defensa cree que el 11-S influyó en la caída del reclutamiento de soldados

'El tratamiento informativo dado al llamado síndrome de los Balcanes [la proliferación de casos de cáncer entre veteranos de la ex Yugoslavia] y los sucesos del 11 de septiembre en EE UU parecen haber tenido una incidencia negativa en el número de jóvenes que han presentado su solicitud para acceder a las Fuerzas Armadas', afirma el Ministerio de Defensa en la memoria anual sobre profesionalización remitida al Congreso.

El informe oficial confirma que la profesionalización de las Fuerzas Armadas sufrió un serio tropiezo en 2001, pues los efectivos de tropa profesional no s...

'El tratamiento informativo dado al llamado síndrome de los Balcanes [la proliferación de casos de cáncer entre veteranos de la ex Yugoslavia] y los sucesos del 11 de septiembre en EE UU parecen haber tenido una incidencia negativa en el número de jóvenes que han presentado su solicitud para acceder a las Fuerzas Armadas', afirma el Ministerio de Defensa en la memoria anual sobre profesionalización remitida al Congreso.

El informe oficial confirma que la profesionalización de las Fuerzas Armadas sufrió un serio tropiezo en 2001, pues los efectivos de tropa profesional no sólo no aumentaron sino que sufrieron una reducción neta de 1.308 efectivos respecto al año anterior. El documento detalla, no obstante, una serie de medidas adoptadas para afrontar esta situación.

El dato más preocupante es la caída de la captación en cerca del 40%. En concreto, en 2001 se presentaron 25.081 solicitudes para tropa profesional, frente a 41.370 de 2000; fueron nombrados alumnos 12.788 jóvenes, frente a 22.812 del año anterior; y firmaron como soldados o marineros algo más de 10.000, frente a 20.016. A 31 de diciembre pasado había en total 74.513 efectivos, cuando estaba previsto llegar a 80.000. Por el contrario, la incorporación de mujeres a las Fuerzas Armadas experimentó un incremento del 23%, hasta llegar a un total de 9.811.

El año pasado fue, también, el último del servicio militar obligatorio, aunque sólo se incoporaron a filas 11.237 jóvenes, el 12,3% de los sorteados.

Además de las causas de carácter estructural ('evolución demográfica, evolución del paro juvenil, falta de conciencia de defensa nacional'), el Ministerio de Defensa alude a factores coyunturales, el síndrome de los Balcanes y los atentados del 11-S en Nueva York y Washington, para explicar lo sucedido.

Admite, en todo caso, que 'la fuerte competencia del mercado laboral' está dificultando la profesionalización. Por ello, sitúa el reciente decreto de retribuciones, que dedica el 80% del incremento global a mejorar los salarios de la tropa y de los suboficiales, como una de las claves para asegurar el éxito del proceso.

El nuevo sistema de selección continua de aspirantes, que se puso en marcha el pasado 1 de enero; los cursos de promoción profesional, de formación ocupacional y de apoyo a la obtención de titulaciones civiles; la creación del nuevo título de grado medio de técnico en defensa; y el plan de apoyo a los reservistas, para facilitar su reinserción laboral, completarían el abanico de medidas ya adoptadas.

El porcentaje de retención (soldados que renuevan su contrato una vez concluido) fue del 77,56%, ligeramente por debajo del año anterior. Las bajas totales ascendieron a 11.542.

El informe no cita la reforma de la Ley del Régimen del Personal Militar para permitir la incorporación de inmigrantes, que ayer fue aprobada en la Comisión de Defensa del Congreso con el apoyo de PP y CiU y la oposición de PSOE e Izquierda Unida, pues el ministerio asegura que su objetivo no es suplir la falta de soldados nacionales.

Significativamente, aunque está previsto que muchos de ellos abandonen forzosamente las Fuerzas Armadas el 31 de diciembre, el informe reconoce que se han reducido en 64 los oficiales de complemento y que la cobertura de su plantilla ha bajado del 81,9 a sólo el 69,4%.