Iñaki Gerenabarrena se impone el reto de derrotar al PP en 2003

El nuevo presidente del PNV alavés, Iñaki Gerenabarrena, dejó muy explícito cuál será su primer reto y cuándo se producirá su primera rendición de cuentas a su partido: la fecha es junio de 2003 y el objetivo recuperar frente al PP el primer puesto en las elecciones locales y volver al gobierno de las instituciones de las que fue desalojado en 1999. Gerenabarrena abandonará en breve el Gobierno vasco, lo que obliga al lehendakari, Juan José Ibarretxe, a una nueva crisis en su equipo para sustituirle. El de Gerenabarrena será el quinto cambio en el Gobierno desde julio.

Iñaki Guer...

El nuevo presidente del PNV alavés, Iñaki Gerenabarrena, dejó muy explícito cuál será su primer reto y cuándo se producirá su primera rendición de cuentas a su partido: la fecha es junio de 2003 y el objetivo recuperar frente al PP el primer puesto en las elecciones locales y volver al gobierno de las instituciones de las que fue desalojado en 1999. Gerenabarrena abandonará en breve el Gobierno vasco, lo que obliga al lehendakari, Juan José Ibarretxe, a una nueva crisis en su equipo para sustituirle. El de Gerenabarrena será el quinto cambio en el Gobierno desde julio.

Iñaki Gueranabarrena fue esta vez el único candidato a la presidencia del Araba Buru Batzar (ABB), la ejecutiva alavesa del PNV, la única que en su renovación en mayo de 2000 se encontró con dos listas enfrentadas.

Aquella crisis no fue sobrevenida, sino fruto del fracaso del PNV en esta provincia en las elecciones locales de 1999, en las que fue batido por el PP, que le arrebató tanto la Diputación como el Ayumtamiento de Vitoria. Con todo, el anterior presidente, su tío, José María Gerenabarrena, logró sacar adelante su candidatura, en una contienda que llegó a los tribunales internos.

Iñaki Guerenabarrena tiene ahora la misión de cerrar aquella brecha e imprimir a su partido una dinámica de unidad y trabajo que le permita afrontar las elecciones de 2003 con expectativas de derrotar al PP y recuperar el gobierno de, al menos, la Diputación foral. Lo contrario, sería un fracaso para el joven presidente de la ejecutiva alavesa.

La colocación de un hombre de 39 años al frente del equipo pone a Álava en coherencia con los otros territorios de la comunidad, que ya tienen a personas de esa misma generación (Juan María Juaristi en Guipúzcoa e Iñigo Urkullu en Vizcaya) al frente de sus ejecutivas. Son la avanzadilla (junto con el propio lehendakari Juan José Ibarretxe) de una renovación generacional que debe culminar con el relevo del presidente del PNV, Xabier Arzalluz, como líder del partido, y de entre ellos puede salir su sustituto.

En su discurso de ayer, una vez elegido por unanimidad en la asamblea regional celebrada en Vitoria, Gerenabarrena dijo que su 'primera asignatura' será precisamente 'recuperar las instituciones alavesas para posiciones que defienden más autogobierno, más libertad y más cohesión con los otros territorios'.

'Maximalismos y excusas'

Gerenabarrena abogó por alinear a Álava con la estrategia política del Gobierno vasco, que, dijo, busca resolver dos grandes retos: terminar con la violencia y dar con la forma de 'colocar a Euskadi en el Estado y en Europa'. Para ambas cosas apostó por alejar a ese territorio de los proyectos 'maximalistas' que a su juicio 'trabajan juntos' y se usan mutuamente como excusa: 'unos dicen que los vascos no podemos decidir porque hay violencia y los otros que como no podemos decidir debe haber violencia'.

El nuevo presidente del ABB cargó con dureza contra los actuales responsables de las institucione alavesas, a los que acusó de apoyar de forma 'entusiasta' y dejarse usar como 'criados que le hacen los recados' al Gobierno central en su 'utilización trastrera' de esas instituciones al servicio del objetivo de 'disgregar' Álava del resto del País Vasco. Como ejemplo, atacó la decisión de la Diputación, dirigida por Ramón Rabanera, de desmarcarse del Gobierno vasco en la cantidad fijada por éste como cupo a pagar al Ministerio de Hacienda. Por ello acusó al PP alavés de preocuparse más de tener 'una mejor y mayor relación con el Gobierno central que con el cumplimiento de las leyes que nos hemos dado todos los vascos' y de no encargarse de 'proteger nuestra economía y nuestras carteras'. Iñaki Gerenabarrena afirmó que su partido se hará oír de aquí a las municipales de 2003 y hará sentir al PP 'que estamos detrás, viendo lo que hacen'.

Cambio en el Gobierno

Las incompatibilidades internas del PNV obligan a Gerenaberrana a abandonar su cargo en el Gobierno como consejero de Agricultura y Pesca y fuerzan por tanto al lehendakari, Juan José Ibarretxe, a efectuar una nueva crisis en su equipo para sustituirle. Fuentes de lehendakaritza señalaron que la fecha más probable para el relevo es la del consejo del martes 22 y guardaron un total hermetismo sobre las intenciones de Ibarretxe acerca del sustituto del consejero, e incluso sobre si éste saldrá del actual equipo del departamento.

Con este cambio, el Gobierno formado por Ibarretxe en julio del año pasado habrá sufrido en sólo seis meses, y en una sucesión de ajustes inusitada, cinco cambios: tres fueron de los consejeros de EA, que cambiaron de departamento antes de la entrada de Izquierda Unida en el ejecutivo, y el cuarto la propia incorporación de Javier Madrazo, tras un primer fracaso en la negociación, que finalmente se remató en septiembre.