El PSN certifica con una enmienda a la totalidad su ruptura con Miguel Sanz
Las cuentas del Gobierno de UPN pueden quedar bloqueadas
Los socialistas navarros certificaron ayer la ruptura total del precario entendimiento político que mantenían con el Gobierno de Miguel Sanz, en los últimos meses. Juan José Lizarbe, secretario general del PSN-PSOE, anunció que, por primera vez en los últimos diez años, los socialistas han presentado una enmienda a la totalidad al proyecto de presupuestos para el próximo año, que Miguel Sanz ha pactado con el CDN. Pero los tres escaños del partido de Juan Cruz Alli no le dan la mayoría para aprobarlos.
La decisión, largamente debatida en el seno del partido, abre una gran interrogante s...
Los socialistas navarros certificaron ayer la ruptura total del precario entendimiento político que mantenían con el Gobierno de Miguel Sanz, en los últimos meses. Juan José Lizarbe, secretario general del PSN-PSOE, anunció que, por primera vez en los últimos diez años, los socialistas han presentado una enmienda a la totalidad al proyecto de presupuestos para el próximo año, que Miguel Sanz ha pactado con el CDN. Pero los tres escaños del partido de Juan Cruz Alli no le dan la mayoría para aprobarlos.
La decisión, largamente debatida en el seno del partido, abre una gran interrogante sobre el futuro de los presupuestos de Sanz, que acusa al PSN de convertir a Batasuna en el 'árbitro' de la política navarra, dado que los votos radicales son imprescindibles para que sean rechazados. Todos los partidos de la oposición han pedido la devolución del proyecto al Ejecutivo, pero las fuerzas están divididas exactamente por la mitad en la Cámara navarra, de manera que en el pleno del día 12 se producirá un previsible empate que impedirá que prosperen las cinco enmiendas a la totalidad. UPN y sus nuevos socios, CDN, suman 25 escaños, y el resto del Parlamento foral, otros 25.
No obstante, el PSN ha asumido el riesgo de votar junto a Batasuna y el resto de la oposición (IU, EA-PNV y Batzarre) contra los presupuestos, que considera muy regresivos, pero no desvela aún qué postura adoptará después. Porque la votación trascendental será la del propio proyecto, ya que, los tres escaños de CDN no le dan a UPN la mayoría suficiente para aprobarlo.
'Hasta el momento el Gobierno no ha demostrado voluntad alguna de acercamiento al PSN o a sus propuestas de progreso, y si el actual proyecto no sufre cambios radicales de mejora, el PSN no podrá apoyarlos y votará en contra', subrayó ayer el líder socialista. Lizarbe recordó que todos los organismos socioeconómicos de consulta preceptiva de Navarra han rechazado el proyecto, desde el Consejo Económico y Social hasta la Comisión Foral de Régimen Local, pasado por el Consejo Navarro de Medio Ambiente. 'Yo he pactado los tres últimos presupuestos de Navarra, pero éste es el peor de los últimos diez años y anula todos los logros introducidos en esos pactos', añadió.
Desde el Gobierno navarro se acusa al PSN de hacer el juego político a Batasuna, pero no se cierra la puerta a un entendimiento de última hora para salvar las cuentas. El consejero de Economía, Francisco Iribarren, expresó ayer su seguridad de que UPN y CDN 'atenderán' las enmiendas socialistas (408 al articulado, con una 'reorientación' del gasto por importe de 19.468 millones de pesetas, sobre los 434.032 proyectados) para conseguir su apoyo o, al menos, una abstención que permitiría a Sanz ver aprobado el presupuesto en el pleno del 28 de diciembre.