El CES detecta una desaceleración en el consumo de los valencianos
El presidente del organismo dice que el informe arroja una visión 'moderadamente optimista'
La desaceleración del fuerte avance del empleo registrada durante los últimos ejercicios, la amortiguación de los efectos de la reforma fiscal y la subida de los tipos de interés son, según la memoria socioeconómica y laboral de la Comunidad Valenciana realizada por el Comité Económico y Social (CES), los factores que explican 'en parte' el freno registrado en el consumo privado. El informe anual del organismo indica cómo uno de los indicativos más representativos de la demanda es la matriculación de turismos que, en el año 2000 sufrió una disminución del 2% respecto del año anterior. Otro ind...
La desaceleración del fuerte avance del empleo registrada durante los últimos ejercicios, la amortiguación de los efectos de la reforma fiscal y la subida de los tipos de interés son, según la memoria socioeconómica y laboral de la Comunidad Valenciana realizada por el Comité Económico y Social (CES), los factores que explican 'en parte' el freno registrado en el consumo privado. El informe anual del organismo indica cómo uno de los indicativos más representativos de la demanda es la matriculación de turismos que, en el año 2000 sufrió una disminución del 2% respecto del año anterior. Otro indicador de consumo es la energía eléctrica destinada a uso doméstico. Este indicador sí que registró un aumento medio del 4,9%, a pesar de que este índice es mucho más moderado que el del año anterior, que se situó en un 9,6%.
El consejero de Economía y Hacienda de la Generalitat, Vicente Rambla, que asistió a la presentación del informe anual del CES, dijo que los datos ratifican la solidez económica de la Comunidad Valenciana y destacó los niveles de exportación alcanzados en el año 2000.
El Comité Económico y Social presentó ayer su memoria anual correspondiente al año 2000, en la que también se manifiesta que la expansión de la actividad económica en la Comunidad Valenciana no ha tenido un perfil uniforme, debido, sobre todo, a la influencia del alza de los precios del petróleo y a la depreciación del euro. Aún así, la Fundación de las Cajas de Ahorros Confederadas ha situado a la Comunidad Valenciana en el segundo puesto de la clasificación de Valor Añadido Bruto, sólo por detrás de Extremadura.
El presidente del CES, Rafael Cerdá, señaló durante la presentación de la memoria anual del organismo que de los datos estudiados se desprende una visión 'moderadamente optimista' de la situación económica por la que atraviesa la Comunidad Valenciana. Cerdá recordó que el CES es un órgano consultivo de la Generalitat valenciana y destacó su independencia.
Crece la actividad industrial
Respecto a los distintos sectores productivos, el informe del CES señala que la agricultura y la industria han perdido peso relativo, mientras que los de servicios y de la construcción lo aumentan. Según las estimaciones de la Fundación de las Cajas de Ahorro Confederadas, la actividad industrial en la Comunidad Valenciana ha crecido un 4,62%, índice ligeramente inferior a la media nacional, que se sitúa en el 4,86%.
En cuanto a la inversión en el sector industrial, resulta destacable, según el informe del CES, que la compra de edificios, terrenos y otras construcciones ha registrado una tasa de variación de casi el 50%, mientras que la variación en maquinaria, instalaciones y utillaje se ha limitado a un 3,9%.
El sector servicios registró en el ejercicio del año 2000 un crecimiento sostenido. Entre otras cosas, el gasto medio de alimentos, bebidas y tabaco en la Comunidad Valenciana se ha incrementado un 7,39%, frente al 12,56% que aumentó en 1999, y el gasto medio en general sigue por debajo de la media española, ya que mientras que en la Comunidad Valenciana el gasto medio por persona se sitúa en 223.277 pesetas, en el resto del país es de 248.001 pesetas.
La memoria del CES hace referencia, de forma amplia, al sector público y menciona de manera detallada los presupuestos y la deuda de la Generalitat. En el caso de los presupuestos, la memoria refleja cómo, según datos oficiales, el Consell dejó de invertir cerca del 18% del montante total previsto para inversiones reales. Esto quiere decir que, en pesetas, se dejaron de ejecutar más de 24.000 millones de pesetas que estaban previstos inicialmente.
El otro capítulo en el que la ejecución arroja un saldo negativo es en el capítulo VII, que corresponde a transferencias de capital, y del que se dejaron de utilizar cerca de 12.000 millones de pesetas previstos. En cuanto a la deuda, la memoria ratifica que la tasa de endeudamiento en la Comunidad Valenciana se ha incrementado en 1,5 puntos porcentuales respecto al año anterior, con lo que se sitúa en segundo lugar en la lista de autonomías más endeudadas.
El repaso por los niveles y condiciones de vida en la Comunidad Valenciana reflejado en la memoria incide en que, pese al destacado nivel de inversión en Sanidad, se observa un excesivo gasto farmaceútico. En el apartado dedicado al medio ambiente el texto habla del ahorro energético y 'la pobre presencia del uso de energías alternativas'. En este sentido indica además que 'la dependencia energética externa sigue siendo el punto débil del sistema energético valenciano'.