Un informe encargado por la Diputación guipuzcoana defiende mantener los peajes
El texto propone tarifas reducidas en la A-8 y A-1
Un estudio técnico encargado por el Departamento de Carreteras de la Diputación de Guipúzcoa a la consultorñia madrileña Ineco concluye que con los recursos presupuestarios forales 'no existe posibilidad de financiar la totalidad de las obras previstas' en la red de carreteras provincial. Por ello, juzga 'conveniente' establecer un sistema de peaje blando para las autopistas Bilbao-Behobia (A-8) y Éibar-Vitoria (A-1). El informe incluye también la posibilidad de emitir un 'bono anual' de uso ilimitado en la A-8.
El estudio considera que con peajes reducidos, 'muy inferiore...
Un estudio técnico encargado por el Departamento de Carreteras de la Diputación de Guipúzcoa a la consultorñia madrileña Ineco concluye que con los recursos presupuestarios forales 'no existe posibilidad de financiar la totalidad de las obras previstas' en la red de carreteras provincial. Por ello, juzga 'conveniente' establecer un sistema de peaje blando para las autopistas Bilbao-Behobia (A-8) y Éibar-Vitoria (A-1). El informe incluye también la posibilidad de emitir un 'bono anual' de uso ilimitado en la A-8.
El estudio considera que con peajes reducidos, 'muy inferiores a los actuales' -1.660 pesetas para los 87 kilómetros que se pagan en el trayecto Bilbao-San Sebastián-, es posible 'hacer frente a las inversiones'. De lo contrario, 'deben retrasarse significativamente los plazos de ejecución' de las carreteras, según afirmó ayer Carlos Bonnelly, gerente de la consultoría, en la ponencia creada en las Juntas Generales de Guipúzcoa para estudiar la financiación de las infraestructuras viarias provinciales.
El informe de Ineco hace constar que el coste de las inversiones previstas en el Plan General de Carreteras de Guipúzcoa asciende a 337.459 millones de pesetas (2.028 millones de euros), mientras que la capacidad inversora de la Diputación hasta 2010 alcanza los 217.700 millones de pesetas (1.308 millones de euros).
Con estas cifras, Bonnelly propuso establecer peajes en la A-8 y en la A-1 por ser 'los ejes principales de mayor calidad que soportan el mayor porcentaje de tráfico de paso'. Sólo con los recursos forales, según Ineco, 'las dotaciones presupuestarias destinadas a carreteras deben incrementarse del orden del 55%'.
Bonnelly precisó que la finalidad del estudio 'no es fijar el importe del precio del peaje', aunque según su informe la tarifa para los vehículos ligeros 'debe ser inferior a las siete pesetas el kilómetro en la A-8 y a 13 pesetas el kilómetro en la A-1'.
El gerente de Ineco dedicó una atención 'especial' a la posibilidad de crear un 'bono anual' para el acceso ilimitado en la A-8 para vehículos ligeros de cualquier procedencia. La empresa consultora sugiere que el precio de este bono 'no debería de ser inferior a 25.000 pesetas al año'.
Las Juntas han abierto un debate sobre la financiación de las carreteras de Guipúzcoa por mandato de los partidos de la oposición, que además en mayo del año pasado pidieron al Ejecutivo foral que la Bilbao-Behobia sea gratis en 2003, cuando concluye la concesión de Europistas.