Columna

Tensiones de última hora

Los inversores no bajaron ayer la guardia respecto de lo que pueda hacer la Reserva Federal, a pesar de que el consenso del mercado apunta mayoritariamente a un descenso de medio punto en los tipos de interés en Estados Unidos. Los últimos indicadores económicos, muy confusos, abren mucho el abanico de opciones, pero las voces más sensatas indican que si la FED no rebaja hoy los tipos de interés podría provocar un cataclismo en los mercados, puesto que éstos ya han descontado cumplidamente ese descenso.

La bolsa española fue como un paradigma de esa desconfianza de última hora de los in...

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Los inversores no bajaron ayer la guardia respecto de lo que pueda hacer la Reserva Federal, a pesar de que el consenso del mercado apunta mayoritariamente a un descenso de medio punto en los tipos de interés en Estados Unidos. Los últimos indicadores económicos, muy confusos, abren mucho el abanico de opciones, pero las voces más sensatas indican que si la FED no rebaja hoy los tipos de interés podría provocar un cataclismo en los mercados, puesto que éstos ya han descontado cumplidamente ese descenso.

La bolsa española fue como un paradigma de esa desconfianza de última hora de los inversores y el índice general de Madrid quedaba a sólo un punto del nivel más bajo del año, al tiempo que el volumen contratado en el Mercado Continuo sólo superaba en 727 millones de pesetas la peor cifra del ejercicio. La contratación total fue ayer de 190.725 millones de pesetas, 1.146,28 millones de euros, y el descenso de Madrid fue del 0,45%, para quedar en el 880,79%. El Ibex 35 cedió el 0,42%.

El resto de los mercados de la zona euro tampoco tuvo un comportamiento brillante, ya que París perdía el 1,10% y Francfort el 1,14% poco antes de concluir la sesión. Nueva York mantenía un discreto avance a media sesión y el mercado Nasdaq bajaba poco más del 1%.

Una buena parte de la culpa de este comportamiento atípico de los mercados en una situación de consenso la tenía la decisión del Banco de Japón de aumentar la liquidez del sistema financiero mediante un recurso poco ortodoxo para tratar de evitar la situación de deflación en que ha entrado su economía. Como en el caso de que la FED baje los tipos de interés medio punto o más, con esas decisiones se está reconociendo la gravedad de la situación.

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