FLORA Y FAUNA URBANAS

FLORA Y FAUNA URBANAS

Diego Such, alcalde de La Nucía, y el ayuntamiento que preside, han acordado dotar con 55 millones de pesetas un premio de periodismo que llevará el nombre del conocido presentador y empresario Luis del Olmo. Bizarra iniciativa para dar a conocer un paraje que debería guardarse y administrarse como oro en paño. Gran noticia para los habituales cazapremios, pero dudamos que el vecindario bendiga tan colosal mordida a su presupuesto municipal.

- Agustín García-Gasco, arzobispo de Valencia, compareció en la presentación del libro de Eduardo Zaplana en Madrid. Pasaba por allí, probablement...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Diego Such, alcalde de La Nucía, y el ayuntamiento que preside, han acordado dotar con 55 millones de pesetas un premio de periodismo que llevará el nombre del conocido presentador y empresario Luis del Olmo. Bizarra iniciativa para dar a conocer un paraje que debería guardarse y administrarse como oro en paño. Gran noticia para los habituales cazapremios, pero dudamos que el vecindario bendiga tan colosal mordida a su presupuesto municipal.

- Agustín García-Gasco, arzobispo de Valencia, compareció en la presentación del libro de Eduardo Zaplana en Madrid. Pasaba por allí, probablemente, y se habrá querido sumar a la fiesta partidaria. De paso, olvida por unas horas o días el incidente aflictivo con el obispo Sanus, la revuelta del clero menos obtuso y el contencioso con el Ayuntamiento de Alberic. Líos a gogó.

José Emilio Cervera, ex responsable de Modernización de la Administración valenciana y ex consejero de Sanidad, tiene motivos para celebrar que no haya prosperado una querella que le interpuso EU. Sin embargo, de los hechos conocidos, y especialmente de los intuidos, se desprende que también tiene motivos para ser comedido, pues el asunto hiede a favoritismo. Prudencia, caray, prudencia.

- Jesús Rodríguez Marín, rector de la Universidad Miguel Hernández, de Elche, no consigue pacificar a buena parte del personal docente, agraviado por el autoritarismo e incluso la opresión que caracterizan la gestión del equipo de gobierno. No es la primera vez que aflora este descontento que tiene su remedio en las urnas. Convóquense elecciones y legitímese a los gestores. Es una fórmula que a menudo funciona entre gente civilizada, incluso universitaria.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En