LOS PROBLEMAS DE LOS INMIGRANTES

92 polizones el año pasado

Todos eran hombres. Todos llegaron a las costas vascas extenuados tras largas travesías escondidos en barcos mercantes. Un total de 92 polizones arribaron a puertos de Euskadi durante el año pasado, según los datos recogidos por la delegación de CEAR en Euskadi. Sólo en lo que va de año, otra docena más de polizones ha recalado en Vizcaya. Estos datos se refieren únicamente a las personas sobre las que CEAR tiene conocimiento de entre las que los capitanes de los barcos descubren. Ni siquiera hay estimaciones de cuántos polizones pueden ser en total.

Exactamente la mitad de los polizone...

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Todos eran hombres. Todos llegaron a las costas vascas extenuados tras largas travesías escondidos en barcos mercantes. Un total de 92 polizones arribaron a puertos de Euskadi durante el año pasado, según los datos recogidos por la delegación de CEAR en Euskadi. Sólo en lo que va de año, otra docena más de polizones ha recalado en Vizcaya. Estos datos se refieren únicamente a las personas sobre las que CEAR tiene conocimiento de entre las que los capitanes de los barcos descubren. Ni siquiera hay estimaciones de cuántos polizones pueden ser en total.

Exactamente la mitad de los polizones sobre los que CEAR hizo gestiones el año pasado llegaron en un sólo grupo el 9 de agosto a Pasaia. El resto se repartió en nueve barcos. De los diez buques, cinco llegaron al puerto de Santurtzi y otros cuatro, al de Pasaia.

La mayoría de grupos tenía entre ocho y dos personas. El grupo de los 46 y otra pareja de polizones embarcaron en Casablanca (Marruecos), pero el grueso del resto de estos pasajeros furtivos abordó los mercantes en puertos africanos, como los de Ciudad del Cabo (Suráfrica), Andijad (Costa de Marfil), Douala (Camerún) o Dakar (Senegal).

La delegación vasca de CEAR no se limita a actuar cuando los barcos con polizones atracan en puertos de la comunidad autónoma. También se ocupan de quienes llegan clandestinamente en barcos al resto de puertos de la cornisa cantábrica. En cuanto saben de la llegada de polizones ponen en marcha toda una red de comunicación entre ONG para que se les atienda en cuanto pidan desembarcar o soliciten asilo político.

El presidente de CEAR, Javier Galparsoro, recuerda otro de los capítulos de la nueva ley de Extranjería muy criticable, el que prevé altas sanciones para los 'transportistas de irregulares'. A juicio de Galparsoro, a partir de la entrada en vigor, el martes pasado, del texto 'el piloto del avión, el capitán del barco y el camionero se convierten en policías'. Se les viene a decir: 'Ustedes deben asegurarse muy bien de la carga que llevan'.

Galparsoro explica que al llegar a puerto los capitanes encierran a los polizones porque si escapan podrían recibir una multa de hasta 30 millones de pesetas.

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