Álava invertirá 240 millones para ayudar a quienes ganan menos de 850.000 pesetas

Ocho días han bastado para poner de acuerdo a populares y socialistas alaveses en materia presupuestaria. La Diputación ya cuenta con un proyecto definitivo de presupuestos para el año 2001, después de tres meses de discrepancias y desencuentros entre ambos partidos. El acuerdo fue cerrado por PP y PSE el jueves por la noche tras una negociación relámpago.

El texto, que se presentará oficialmente a finales de este mes y se prevé aprobar en la primera quincena de marzo, tiene un carácter continuista e incluye 38 exigencias de los socialistas, valoradas en 2.140 millones, entre las que de...

Ocho días han bastado para poner de acuerdo a populares y socialistas alaveses en materia presupuestaria. La Diputación ya cuenta con un proyecto definitivo de presupuestos para el año 2001, después de tres meses de discrepancias y desencuentros entre ambos partidos. El acuerdo fue cerrado por PP y PSE el jueves por la noche tras una negociación relámpago.

El texto, que se presentará oficialmente a finales de este mes y se prevé aprobar en la primera quincena de marzo, tiene un carácter continuista e incluye 38 exigencias de los socialistas, valoradas en 2.140 millones, entre las que destacan los 240 millones para mejorar el salario social que aporta la Diputación alavesa a las personas con unos ingresos anuales inferiores a 850.000 pesetas.

Además, el pacto incluye otros 150 millones para garantizar el peaje social de la autopista A-68 y 470 millones más para una convocatoria de unas oposiciones que darán empleo a 116 nuevos funcionarios. Con un sentido más político, el acuerdo también pretende sentar las bases del futuro Concierto y de la Ley de Aportaciones.

La Diputación de Álava se convertirá en marzo en la primera gran institución vasca en aprobar sus presupuestos en este año 2001 marcado por la debilidad de los gobiernos en minoría. La fórmula alavesa será la misma del año pasado, sólo que esta vez la negociación entre PP y PSE ha resultado fulgurante, en sólo cuatro reuniones bilaterales. Por parte del gobierno foral, el número dos, Carlos Samaniego, actuó como interlocutor único ante el portavoz socialista, Juan Carlos Prieto.

El requisito clave para desbloquear las conversaciones fue la retirada del proyecto del Gobierno foral de Ramón Rabanera. Según aseguró ayer Prieto, las conversaciones se han desarrollado 'de igual a igual' entre los dos partidos y 'sin que haya interferido el momento electoral'.

El PSE hizo público ayer el pacto y se apuntó el logro de que el presupuesto tenga un 'carácter social'. El proyecto estelar es el llamado 'complemento asistencial de garantía mínima', esto es, un salario social que la Diputación entregará a todas las personas empadronadas en Álava hace al menos un año que carezcan de recursos. En el último ejercicio ya se ha aplicado a unas 800 personas cuyos ingresos anuales eran inferiores a 750.000 pesetas anuales. La Diputación se gastó en esta partida unos 100 millones.

Ahora, la medida se ampliará tanto en la cuantía como en el número de beneficiarios. Podrán percibir la ayuda quienes ganen menos de 865.000 pesetas anuales, una cantidad que abarca a un potencial de unos 1.500 beneficiarios. Según el pacto entre PP y PSE, la Diputación dedicará una partida de 240 millones de pesetas a este concepto. Las ayudas incluyen una condición: quienes tengan edad y condiciones para trabajar estarán obligados a aceptar los empleos que les ofrezca la Administración.

Otra exigencia socialista, puesta en marcha a raíz del anterior presupuesto, obliga al Gobierno foral a garantizar el peaje social en la A-68 a todos los conductores alaveses. Este año, la Diputación destinará 150 millones, que aumentarán si es preciso. La medida, firmada el mes pasado, se pondrá en marcha el 1 de febrero. Los autobuses ya circulan gratuitamente desde hace un mes.

Oferta de empleo

El PP y el PSE han acordado también convocar este año una Oferta Pública de Empleo (OPE) para 116 nuevas plazas en la Administración foral, además de contratar a otras 86 personas para el Departamento de Bienestar Social y el Centro de Cálculo. Este acuerdo trata de paliar los efectos de la entrada en vigor de la jornada de 35 horas en el funcionariado y significará un gasto de 470 millones. Según avanzaron ayer los socialistas, existe la intención de que los nuevos empleados forales 'estén trabajando ya a finales de este año'.

Los socialistas han pedido además la inclusión de otros 300 millones para ayudar a la financiación de los ayuntamientos de la provincia en caso de que éstos se vean perjuficados por el reparto de la recaudación derivada de la Ley de Aportaciones. Paralelamente, existe un compromiso entre los dos partidos para elaborar un estudio que siente unos criterios básicos para reformar la propia ley y para renovar el Concierto Económico.

Otro acuerdo de tinte político afecta al terreno turístico. La Diputación invertirá 75 millones en una campaña denominada Álava abierta que, según anunció el portavoz socialista, Juan Carlos Prieto, trasladará fuera del País Vasco 'la imagen de que no necesariamente los nacionalistas tienen que gobernarla, que es diferente, que sus productos no necesitan del nacionalismo'.

Entre las 38 partidas introducidas por los socialistas hay 15 millones para la Fundación Fernando Buesa y para 'recuperar espacios para la paz', es decir, la reforma de lugares atacados por radicales. El Museo de Arte Contemporáneo, Artium, también tendrá partidas extras de 160 millones.