Educación sexual
No estoy de acuerdo con el programa de educación sexual que el Instituto Andaluz de la Juventud en Granada y el Instituto de Sexología Al-Andalus pretenden imponer a nuestros hijos sin consultarnos a los padres. Lo que me interesa para mi hija es que conozca las claves para encontrar un amor verdadero y estable y que sepa las consecuencias psicobiológicas, sociales y económicas de las aventuras sentimentales, del divorcio y de las prácticas homosexuales.Yo quiero que conozca todas las enfermedades que se transmiten por contacto sexual, no sólo el sida, y lo poco que hace falta para contraerlas...
No estoy de acuerdo con el programa de educación sexual que el Instituto Andaluz de la Juventud en Granada y el Instituto de Sexología Al-Andalus pretenden imponer a nuestros hijos sin consultarnos a los padres. Lo que me interesa para mi hija es que conozca las claves para encontrar un amor verdadero y estable y que sepa las consecuencias psicobiológicas, sociales y económicas de las aventuras sentimentales, del divorcio y de las prácticas homosexuales.Yo quiero que conozca todas las enfermedades que se transmiten por contacto sexual, no sólo el sida, y lo poco que hace falta para contraerlas. Deseo que tenga claro qué efectos secundarios provocan cada uno de los actuales métodos anticonceptivos y de reproducción artificial, y que vea cómo se hace un aborto.
Y quiero que conozca los métodos modernos de detección de la fertilidad de la mujer, así como su fiabilidad para espaciar los nacimientos y para buscarlos cuando no vienen, y sus virtualidades integradoras para la pareja.
Lo otro me parece corrupción de menores. Respeto a los padres que se presten a eso. Pero yo no estoy dispuesto a que estos señores roben a mi hija su capacidad de realizarse como persona en un amor limpio y duradero.- César Díaz Pérez. Médico. Granada.