Los palestinos piden a la UE que rompa su neutralidad "cínica"

Europa no puede "permanecer neutral" en el conflicto de Oriente Próximo con posturas "cínicas e hipócritas", declaró Nabil Shaath, ministro de Planificación y Cooperación Internacional palestino, que asiste a la cuarta Conferencia Euromediterránea, inaugurada ayer por la tarde en Marsella con el boicoteo de Siria y Líbano.

Shaath pidió en nombre del pueblo palestino protección internacional para detener la violencia en Gaza y Cisjordania. Cuatro miembros de su delegación no pudieron llegar por prohibición israelí. El ministro reiteró, en declaraciones a medios árabes, la propuesta de Ya...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Europa no puede "permanecer neutral" en el conflicto de Oriente Próximo con posturas "cínicas e hipócritas", declaró Nabil Shaath, ministro de Planificación y Cooperación Internacional palestino, que asiste a la cuarta Conferencia Euromediterránea, inaugurada ayer por la tarde en Marsella con el boicoteo de Siria y Líbano.

Shaath pidió en nombre del pueblo palestino protección internacional para detener la violencia en Gaza y Cisjordania. Cuatro miembros de su delegación no pudieron llegar por prohibición israelí. El ministro reiteró, en declaraciones a medios árabes, la propuesta de Yasir Arafat de enviar una fuerza internacional de interposición. Israel se opone. También Estados Unidos. La UE no la excluye.El representante de Arafat y el ministro de Exteriores israelí, Shlomo Ben Ami, intercambiaron palabras duras. Shaath describió la situación en términos de "agresor y agredido" y pidió a los europeos que se involucren más en la solución de la crisis. Su colega israelí acusó a Arafat de "incapacidad o mala voluntad" para cortar la nueva Intifada. "Estamos dispuestos a pagar el precio más alto para lograr la paz", aseguró Ben Ami. No obstante, fuentes europeas valoraron de forma positiva el hecho de que durante la cena ambos, que casi monopolizaron el diálogo, no perdieran las buenas maneras a pesar del tono duro que emplearon.

La conferencia ministerial de Marsella, a la que asisten también el Alto Representante de la UE, Javier Solana, y el plenipotenciario europeo en Oriente Próximo, Miguel Ángel Moratinos, comenzó con un pequeño triunfo para la presidencia francesa. París no logró persuadir ni a sirios ni a libaneses -"su ausencia es lamentable", manifestó el ministro de Asuntos Exteriores, Hubert Védrine- a pesar de las presiones diplomáticas. Pero sí logró que Libia cambiara a última hora de opinión y enviara al secretario del Comité Popular de Exteriores, Abderramán Chalgam, quien manifestó que "Europa sigue sin comprender la importancia del mundo árabe", un comentario tachado de desafortunado por la mayoría de los asistentes.

Trípoli no es miembro pleno del foro, nacido en 1995 en Barcelona y que agrupa a los 15 países de la UE con los 12 de la cuenca meridional mediterránea (incluido Israel), pero tiene estatuto de observador desde abril de 1999. Paradójicamente, el líder libio, Muammar el Gaddafi, que no ha suscrito aún la filosofía política de Barcelona, ha sido quien más alentó, junto con Siria, a los Gobiernos árabes a romper relaciones con Israel desde que la violencia estalló en Gaza y Cisjordania hace ya siete semanas, con un saldo de más de 200 muertos.

Védrine reconoció que el encuentro se celebra en un "clima desfavorable", pero "la UE está convencida de que la cooperación euromediterránea es suficientemente importante en sí misma y para el futuro, y debe proseguirse, al margen de las vicisitudes del proceso de paz".

Para los Quince no hay más vía posible que el diálogo y la búsqueda de la paz entre israelíes y palestinos. "Hay que hacer todo lo posible para mantener los compromisos, poner fin a la violencia y volver a la calma y a la razón, recrear una esperanza", manifestó el jefe de la diplomacia francesa.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Pero la esperanza no se atisba por el momento. A la incertidumbre que supone la salida de Bill Clinton de la Casa Blanca y las vacilaciones europeas se suma ahorael retorno de Siria a posturas antiisraelíes desde la llegada de Bachar el Asad al poder.

Archivado En