Rh negativo
Acabo de oír en la cadena SER a Joseba Egibar decir que la posesión del Rh negativo no quiere decir nada, pero que es un hecho objetivo y científicamente demostrado que los vascos presentan esta característica sobre el resto de la población de una manera estadísticamente significativa. Con independencia de los muchos problemas que plantea la anterior afirmación -se piensa enseguida si la cuestión no está en que los vascos tengan el Rh negativo, sino en que sean vascos los que tengan el Rh negativo-, uno recuerda una anécdota entre un director de la Filarmónica de Londres y su colega de la de M...
Acabo de oír en la cadena SER a Joseba Egibar decir que la posesión del Rh negativo no quiere decir nada, pero que es un hecho objetivo y científicamente demostrado que los vascos presentan esta característica sobre el resto de la población de una manera estadísticamente significativa. Con independencia de los muchos problemas que plantea la anterior afirmación -se piensa enseguida si la cuestión no está en que los vascos tengan el Rh negativo, sino en que sean vascos los que tengan el Rh negativo-, uno recuerda una anécdota entre un director de la Filarmónica de Londres y su colega de la de Moscú.Se quejaba este último de que los acusaban de antisemitas sin ninguna razón: "¿Cómo vamos a ser antisemitas si en mi orquesta tocan 12 judíos?". Después le preguntó a su colega cuántos judíos tocaban en la orquesta de Londres. El director inglés le contestó: "No lo sé. Nunca se me ocurrió contar a mis músicos por su procedencia".
Hoy está fuera de duda que todos los seres humanos son radicalmente iguales, incluidos los que a sí mismo se consideran diferentes, y que lo que son capaces de hacer unos, también pueden hacerlo los otros.
Esto debe llevarnos a ser muy precavidos, porque los españoles que no sean nacionalistas vascos radicales pueden llegar a cargarse de tanto odio hacia lo abertzale como este sector ha sido capaz de acumular hacia lo español.
Si se llega a este extremo, la situación difícilmente tendrá marcha atrás.- Jaime Martínez Montero. Cádiz.