El dolor, principal síntoma en el 70% de los cánceres
El dolor en los pacientes con cáncer puede ser controlado. Éste es el mensaje más relevante del proyecto Algos (dolor, en griego), una iniciativa de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), emprendida hace dos años para sensibilizar tanto a los profesionales sanitarios como a la sociedad en general de que el paciente con cáncer no tiene por qué sufrir dolor necesariamente, el síntoma principal y más frecuente en el 70% de los casos.El coordinador de este proyecto y catedrático de Oncología Médica de la Universidad Complutense de Madrid, Eduardo Díaz Rubio, admite que tradicionalmente e...
El dolor en los pacientes con cáncer puede ser controlado. Éste es el mensaje más relevante del proyecto Algos (dolor, en griego), una iniciativa de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), emprendida hace dos años para sensibilizar tanto a los profesionales sanitarios como a la sociedad en general de que el paciente con cáncer no tiene por qué sufrir dolor necesariamente, el síntoma principal y más frecuente en el 70% de los casos.El coordinador de este proyecto y catedrático de Oncología Médica de la Universidad Complutense de Madrid, Eduardo Díaz Rubio, admite que tradicionalmente el oncólogo se ha preocupado más por aspectos como la evolución de la enfermedad y la respuesta al tratamiento que por aquéllos relacionados con su calidad de vida, como es el dolor.
"Sin embargo, el dolor incide de forma importante en el estado de ánimo del paciente y en su actitud ante la enfermedad. Además está comprobado que un modelo de analgesia eficaz mejora la respuesta al tratamiento anticanceroso", dice Díaz Rubio. Según este experto, en los últimos años se han producido grandes avances en el control de este síntoma del cáncer y "de hecho, en los noventa han aparecido más drogas contra el dolor que en los cincuenta años anteriores".
"Los analgésicos más potentes que se emplean", explica, "son los opiodes mayores, que se pueden administrar por vía oral, intramuscular y transdérmica mediante un parche". Esta última vía resulta muy cómoda al ser un parche sobre la piel, que se cambia cada tres días.
Díaz Rubio hace frente al tópico de que los opiodes tienen un gran riesgo de crear adicción: "Siempre que estén bien manejados por el médico, no generan este tipo de efecto indeseable", explica. Y añade que con estos fármacos se puede controlar el dolor hasta en el 90% de los casos; el 10% restante debe someterse a técnicas neuroquirúrgicas.
Los miembros del proyecto Algos acaban de crear una página web (www.proyectoalgos.org), de libre acceso para los usuarios de Internet. Su primer responsable, Carlos Jara, jefe de Oncología Médica del Hospital Fundación Alcorcón de Madrid, destaca que en la página web se ha creado un dominio para profesionales y otro para usuarios. "En el dominio para profesionales", explica Jara, "se incluyen protocolos de tratamiento del dolor oncológico y escalas analgésicas de la Organización Mundial de la Salud, que son estándares en el manejo de este síntoma. Está prevista también la inclusión de una guía farmacológica. En el dominio para usuarios se ofrece información sobre el control del dolor en un lenguaje divulgativo y comprensible con el mensaje claro de que éste es tratable, y también direcciones en la red relacionadas con el tema".
A juicio de este especialista, la página web es una herramienta "que pretende tener un sentido práctico y de utilidad para todos los interesados, ya sean profesionales sanitarios o no, por lo que se trata de una información constantemente renovable y que además tiene garantías de rigor por cuanto está avalada por los oncólogos del proyecto Algos".