Un informe sobre Muebles Peralta dice que el edificio no es apto para ningún uso
El informe pericial elaborado por el arquitecto Manuel Flores Llamas para determinar las causas del derrumbe del edificio de Muebles Peralta en Dos Hermanas (Sevilla) , que el pasado 3 de febrero ocasionó la muerte de tres personas y heridas a otras 182, ha puesto de manifiesto que el inmueble no era apto para "ningún tipo de uso", ni siquiera como almacén, según informaron fuentes próximas a la instrucción judicial del caso.El informe pericial, encargado por el juzgado de Instrucción número 4 de Dos Hermanas, que investiga el caso, es concluyente a la hora de asegurar que el edificio siniestr...
Declaración
El informe pericial elaborado por el arquitecto Manuel Flores Llamas para determinar las causas del derrumbe del edificio de Muebles Peralta en Dos Hermanas (Sevilla) , que el pasado 3 de febrero ocasionó la muerte de tres personas y heridas a otras 182, ha puesto de manifiesto que el inmueble no era apto para "ningún tipo de uso", ni siquiera como almacén, según informaron fuentes próximas a la instrucción judicial del caso.El informe pericial, encargado por el juzgado de Instrucción número 4 de Dos Hermanas, que investiga el caso, es concluyente a la hora de asegurar que el edificio siniestrado no se hallaba en condiciones de ser usado para ninguna actividad, ni siquiera como almacén de muebles por los propios empleados de la empresa.
En este sentido, una prueba de carga realizada en el edificio de Muebles Peralta a finales de junio ya puso de manifiesto que toda la nave corría peligro de hundimiento, por no reunir los requisitos establecidos en la legislación vigente respecto al peso capaz de soportar por metro cuadrado.
La prueba concluyó que el edificio no estaba preparado para soportar ni los 600 kilos por metro cuadrado que establece la actual normativa de edificación (AE88) para oficinas y superficies comerciales ni los 400 kilos por metro cuadrado que estipulaba la normativa vigente en 1975 (la MV-101), cuando se construyó el inmueble.
Esta prueba consistió en realizar un corte transversal en el suelo de la nave siniestrada y, con la ayuda de un gato hidráulico, ir aumentando la presión progresivamente hasta alcanzar el peso necesario para producir la rotura.
La conclusión fue similar al informe elaborado por el ingeniero Rafael López Palanco en 1983 para reforzar la demanda presentada por Muebles Peralta contra la constructora que edificó la nave. En ese informe técnico, se estimaba en 120 kilos por metro cuadrado de superficie la carga "más óptima" para el edificio.
En 1993 Muebles Peralta ganó la demanda que interpuso contra las dos compañías constructoras del edificio, que fueron condenadas a pagar 88 millones por las deformaciones de los forjados que afectaban a todas las plantas del edificio. Un inspector de trabajo ya apreció con anterioridad "graves deformaciones" en el edificio.
El decano del Colegio de Ingenieros Industriales de Andalucía Occidental, José Manuel Bueno Lidón, explicó el pasado 10 de marzo que su colegio había estudiado el proyecto original, realizado en 1973 por Manuel García Pizarro, y destacó que la nave derrumbada estaba prevista originalmente para oficinas pero se utilizó como almacén y zona de exposición, y posteriormente se añadieron dos naves más para las que no estaba preparada la estructura.
Los responsables de Urbanismo del Ayuntamiento de Dos Hermanas aseguraron que no había constancia de que Muebles Peral hubiera pedido licencia para realizar obras de ningún tipo.
A la vista del informe pericial, el juzgado de Instrucción número 4 de Dos Hermanas citó a declarar como imputado para el próximo viernes a Francisco Peralta, administrador único de Bética Industrial, la sociedad propietaria del edificio de Muebles Peralta.El juzgado, que impuso una fianza de 1.200 millones de pesetas a esta empresa familiar de muebles para hacer frente a la responsabilidad civil derivada del suceso, también ha citado para la semana que viene al arquitecto Manuel Flores Llamas para que ratifique su peritaje.