Televisión en el metro

En días pasados he visto en televisión que el Ayuntamiento de Madrid, o la Comunidad de Madrid (siento la imprecisión, ya que vi la noticia fugazmente), ha aprobado un costoso proyecto (7.000 millones de pesetas) para dotar a toda la red del metro de la capital de televisiones para que los viajeros puedan entretenerse.Bien, escribo esta carta para decir que me parece muy bien el proyecto, pero que lo aplaudiré cuando las personas en silla de ruedas también puedan acceder a la línea de metro de Madrid, ya que en la actualidad no hay apenas estaciones adaptadas a los discapacitados. Digo yo que ...

En días pasados he visto en televisión que el Ayuntamiento de Madrid, o la Comunidad de Madrid (siento la imprecisión, ya que vi la noticia fugazmente), ha aprobado un costoso proyecto (7.000 millones de pesetas) para dotar a toda la red del metro de la capital de televisiones para que los viajeros puedan entretenerse.Bien, escribo esta carta para decir que me parece muy bien el proyecto, pero que lo aplaudiré cuando las personas en silla de ruedas también puedan acceder a la línea de metro de Madrid, ya que en la actualidad no hay apenas estaciones adaptadas a los discapacitados. Digo yo que con 7.000 millones se podrían ensanchar puertas de acceso y máquinas convalidadoras de billetes, se instalarían unos cuantos ascensores...

En fin, Metro, servicio público, debería dirigir sus esfuerzos y dineros a que todos los ciudadanos puedan utilizarlo, y también los discapacitados que utilizan silla de ruedas.

Me dirijo a quien corresponda para que recapacite sobre esa inversión. Creo que los millones de usuarios del metro podrán aguantar unos años sin televisión en los vagones, continuar leyendo los diarios, novelas o revistas, mirar por las ventanas o charlar con alguien, si con este gran sacrificio miles de discapacitados pueden acceder a un servicio de todos, pagado por todos y, en teoría, para todos. Sólo quiero añadir que lo que pido con esta carta es algo tan obvio, tan justo y amparado por tantas leyes que me duele tener que escribirlo una y otra vez. Por favor, hagan la ciudad y sus servicios de todos y para todos, y déjennos de televisiones y accesorios superfluos, al menos hasta que todos podamos disfrutar de los mismos.- Óscar Hernández.