El Parlamento rechaza la reelección del 'ararteko' por una pelea entre PNV y PSE
La falta de acuerdo y los intereses partidistas frustraron ayer en el Parlamento vasco la reelección de Xabier Markiegi como ararteko para los próximos cinco años, y eso que era un candidato que contaba con el beneplácito de todos los grupos, salvo EH, para continuar. Sólo 25 parlamentarios del PNV, Izquierda Unida y UA, más una fuga de un voto, previsiblemente del PSE, respaldaron al candidato, mientras que socialistas, populares y EA, 35 papeletas en total, votaron en blanco. La razón que dieron los socialistas es que el PNV no se comprometió a apoyar a la adjunta que ellos proponían, Arantz...
La falta de acuerdo y los intereses partidistas frustraron ayer en el Parlamento vasco la reelección de Xabier Markiegi como ararteko para los próximos cinco años, y eso que era un candidato que contaba con el beneplácito de todos los grupos, salvo EH, para continuar. Sólo 25 parlamentarios del PNV, Izquierda Unida y UA, más una fuga de un voto, previsiblemente del PSE, respaldaron al candidato, mientras que socialistas, populares y EA, 35 papeletas en total, votaron en blanco. La razón que dieron los socialistas es que el PNV no se comprometió a apoyar a la adjunta que ellos proponían, Arantza Leturiondo.Markiegi concluye su mandato, tras la presente prórroga legal de seis meses, el próximo 10 de septiembre, fecha en la que reglamentariamente deberá asumir el cargo en funciones la actual adjunta, Mertxe Agundez.
Con el rechazo de ayer, la continuidad de Markiegi se queda como una posibilidad que dependerá de que le vuelva a proponer el PSE, ya que el PNV posiblemente no lo haga, aunque los nacionalistas no negaron que, en caso de que otro partido planete su nombre, ellos pudieran darle su apoyo. "Tendremos que replantearlo y reflexionar, aunque esto es un mal precedente", dijo el portavoz del grupo nacioanlista, José Antonio Rubalkaba.
La falta del consenso mínimo de tres quintos de los parlamentario (45 sobre 75) que exige la ley llevó a UA a solicitar un receso para intentar un acuerdo de última hora. Minutos después era la propia Unidad Alavesa la que retiraba la propuesta para evitar una votación en la que el ararteko fuera rechazado. Los socialistas lo aceptaron, pero el PNV optó por seguir adelante. A partir de ese momento, PNV y PSE se acusaron mutuamente de "quemar" a Markiegi, quien por la mañana había sido respaldado en público por el lehendakari para que continuase.
El portavoz socialista, Rodolfo Ares, recordó al PNV su minoría, lo que le obliga a "buscar apoyos para sacar adelante sus propuestas". PÁGINA 3