La UE unifica la legislación del divorcio y de protección de los hijos El Congreso de Derecho de Familia apuesta por la homologación legal

La Unión Europea (UE) unifica hoy en Bruselas la legislación en materia de divorcio y protección de los hijos en caso de ruptura matrimonial, que será el primer paso para la homologación del derecho de familia propuesta por el II Congreso Europeo de Derecho de Familia clausurado ayer en Alicante, tras cuatro jornadas en las que participaron cerca de 300 juristas.La catedrática de Derecho Internacional Privado Alegría Borrás, representante de España en Bruselas en materia de protección al menor, informó al congreso de que hoy se aprueba Bruselas II, la norma jurídica suscrita por 14 de los 15 E...

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La Unión Europea (UE) unifica hoy en Bruselas la legislación en materia de divorcio y protección de los hijos en caso de ruptura matrimonial, que será el primer paso para la homologación del derecho de familia propuesta por el II Congreso Europeo de Derecho de Familia clausurado ayer en Alicante, tras cuatro jornadas en las que participaron cerca de 300 juristas.La catedrática de Derecho Internacional Privado Alegría Borrás, representante de España en Bruselas en materia de protección al menor, informó al congreso de que hoy se aprueba Bruselas II, la norma jurídica suscrita por 14 de los 15 Estados de la UE (la excepción es Dinamarca), que comenzará a aplicarse en 2001 y que, por su rango superior a una directiva comunitaria o a un convenio, sin necesidad de ser ratificada por los Estados se superpondrá a las leyes internas, de modo que impedirá las sentencias contradictorias y los conflictos de competencia entre los jueces de diferentes países europeos.

Borrás puso el ejemplo de una francesa y un español con un hijo de cinco años, que reclaman respectivamente la custodia del niño en París y Barcelona. Dijo que, frente a la actual diversidad de resoluciones judiciales de ambos países, a partir de la vigencia de Bruselas II, sólo podrán obtener una sentencia, de obligada ejecución en el país vecino.

Sustracción de niños

Por su parte, Luz Puerto, subsecretaria de Cooperación del Ministerio de Justicia, informó de que de las 100 peticiones anuales por sustracción de menores por sus padres sólo se solucionan la mitad. Puerto, autoridad central de Justicia en esta materia, resaltó la importancia de que se comunique con rapidez la sustracción del niño. Explicó que el juez del país en que se encuentre puede denegarlo si transcurre un año o cuando el hijo no desea ser entregado al otro padre o madre, si tiene grado de madurez suficiente, circunstancia que suele apreciarse a los 10 u 11 años, pero a veces también entre 7 y 8 años.

Borrás resaltó que, mientras la unificación europea en divorcio y protección de menores no se produce hasta ahora, en 1968 se aprobó un texto similar, para homologar contratos.

El fiscal jefe de Valladolid, Luis María Delgado, recordó que la primera petición de protección judicial para una niña se produjo hace 126 años, cuando en 1874 el presidente de una sociedad protectora de animales, tras encontrar a una niña atada con cadenas, desnuda y con señales de haber sido golpeada, logró que se abriera un proceso penal que terminó en condena, pese a que la policía indicó al protector de animales que no podía actuar porque no existía el delito de maltrato a niños. Delgado explicó la esquizofrenia que significa hoy para los fiscales ser esencialmente acusadores, a la vez que protectores de los menores, pero sin los medios necesarios.

Entre las conclusiones del congreso resalta la conveniencia de regular "en leyes independientes" las uniones de parejas heterosexuales y homosexuales, así como la situación jurídica del transexual. A propuesta del magistrado Eduardo Hijas, se manifestó que la nueva Ley de Enjuiciamiento Civil, en vez de facilitar los procesos de familia, los ha complicado. Se reprochó a dicha ley no atribuir a los jueces de familia el conocimiento de las reclamaciones de las parejas de hecho.

En todo caso, la asignación de tales competencias colapsaría aún más los escasos juzgados de familia. Un ejemplo se padece en Alicante, donde sólo hay un juzgado de familia para toda la provincia. Ayer, antes de clausurar el congreso, el consejero de Justicia de la Comunidad Valenciana, Carlos González Cepeda, prometió para el año próximo un nuevo juzgado de familia.

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