China libera a 10.000 mujeres secuestradas y forzadas a prostituirse
La policía china ha rescatado, en sólo un mes, a 10.000 mujeres de las mafias del crimen organizado que las habían secuestrado y las obligaban a prostituirse en burdeles de todo el país, según informaba ayer la prensa local. Según Liu Hairong, director del Comité de Trabajo para Mujeres y Niños del Consejo de Estado, la campaña contra el tráfico de personas ha sido un "éxito rotundo" desde que comenzó el pasado 1 de abril.
La operación, dirigida por el Ministerio de Seguridad Pública y la Federación de Mujeres de Toda China, también ha identificado a cerca de 10.000 personas sospechosas...
La policía china ha rescatado, en sólo un mes, a 10.000 mujeres de las mafias del crimen organizado que las habían secuestrado y las obligaban a prostituirse en burdeles de todo el país, según informaba ayer la prensa local. Según Liu Hairong, director del Comité de Trabajo para Mujeres y Niños del Consejo de Estado, la campaña contra el tráfico de personas ha sido un "éxito rotundo" desde que comenzó el pasado 1 de abril.
La operación, dirigida por el Ministerio de Seguridad Pública y la Federación de Mujeres de Toda China, también ha identificado a cerca de 10.000 personas sospechosas de tráfico de seres humanos.Durante este tiempo, la policía ha liberado, además, a varios cientos de niños que estaban a la espera de ser adoptados o se dedicaban a mendigar por la calle, una práctica muy habitual en las grandes ciudades chinas. En el último mes han aparecido en la prensa local numerosas fotografías de los niños liberados, con algunos datos sobre su origen, para facilitar el reencuentro entre los pequeños y sus padres.
Mientras tanto, las mujeres y los niños permanecen en centros de acogida, que existen en todas las provincias chinas, gracias a la colaboración del Estado y organizaciones no gubernamentales. En la mayoría de los casos, tanto las mujeres como los niños provienen del campo, donde son secuestrados y posteriormente vendidos en zonas alejadas de su lugar de origen, para que no puedan escaparse y regresar a sus casas.
Las mujeres suelen acabar en prostíbulos clandestinos o casadas con jóvenes agricultores que no logran encontrar esposa y deciden comprar una para asegurar su descendencia. Los pequeños, por su parte, son comprados por parejas con problemas de fertilidad a bajo precio (oscilan entre 32.000 y 90.000 pesetas) o engrosan las redes criminales que facilitan niños para mendigar o incluso robar.
"La campaña también ha ayudado a educar a las mujeres sobre sus derechos", explicó Liu, quien considera imprescindible la colaboración ciudadana para destapar las redes criminales.
El tráfico de mujeres y niños se ha disparado en China en los últimos años, debido a la creciente diferencia entre ricos y pobres y la corrupción generalizada de la policía y la Administración.
Precisamente, cuatro agricultores fueron ejecutados ayer por ese motivo. La ejecución se llevó a cabo después de que el Tribunal Supremo confirmara las penas de muerte de los cuatro acusados en tres casos de secuestro y venta de medio centenar de mujeres y niñas, según la agencia de noticias oficial Nueva China.