La fiscalía solicita la pena de muerte contra el ex primer ministro paquistaní

La fiscalía solicitó ayer la pena de muerte para el ex primer ministro de Pakistán Nawaz Sharif, depuesto por un golpe de Estado encabezado el pasado 12 de octubre por el general Pervez Musharraf. La petición de condena se produce cinco días antes de la llegada al país del presidente de EEUU, Bill Clinton, quien pedirá personalmente al régimen militar paquistaní que no ejecute a Sharif aunque sea hallado culpable."El tribunal deberá otorgar la máxima pena por los cargos imputados", solicitó el fiscal Raja Qureshi al tribunal antiterrorista que juzga a Sharif en Karachi, al sur del país, quien ...

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La fiscalía solicitó ayer la pena de muerte para el ex primer ministro de Pakistán Nawaz Sharif, depuesto por un golpe de Estado encabezado el pasado 12 de octubre por el general Pervez Musharraf. La petición de condena se produce cinco días antes de la llegada al país del presidente de EEUU, Bill Clinton, quien pedirá personalmente al régimen militar paquistaní que no ejecute a Sharif aunque sea hallado culpable."El tribunal deberá otorgar la máxima pena por los cargos imputados", solicitó el fiscal Raja Qureshi al tribunal antiterrorista que juzga a Sharif en Karachi, al sur del país, quien recordó que la "pena máxima para el secuestro es la sentencia de muerte".

El fiscal también pidió la pena capital para los otros seis acusados, incluido Shahbaz Sharif, hermano del derrocado primer ministro, por las mismas acusaciones que pesan contra el ex jefe del Ejecutivo paquistaní.

Todos los cargos están relacionados con los incidentes que condujeron al golpe de Estado. El fiscal alega que los acusados pusieron en peligro la vida de todos los pasajeros del avión civil en el que 198 personas, entre ellas el general Pervez Musharraf, regresaban de Sri Lanka a Pakistán el 12 de octubre del año pasado al negar el permiso de aterrizaje al aparato, que tenía combustible sólo para siete minutos cuando tomó tierra, después de que el Ejército se hiciera con el control del aeropuerto.

Horas después, Musharraf tomó el poder en un golpe de Estado incruento y, dos días más tarde, declaró el estado de emergencia y suspendió el Parlamento federal y los Parlamentos regionales.

"Está demostrado que los acusados se encontraban en el proceso de la trama de la conspiración. Están completamente implicados en la ejecución del crimen", afirmó ayer el fiscal, quien deberá concluir la exposición de sus argumentos antes del miércoles, para que la defensa pueda presentar sus alegaciones. Todos los acusados se han declarado inocentes de los cargos que se les imputa en este juicio.

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