La temporada arranca con 200.000 truchas repobladas

La reina de los ríos, la trucha, se puede pescar desde ayer en los cauces fluviales de la región. La temporada arrancó con una repoblación masiva de los ríos y embalses madrileños. La Consejería de Medio Ambiente proyecta echar 200.000 truchas al principio de la temporada, 170.000 de la especie arco iris (Salmo irideus) y 30.000 de la especie denominada común (Salmo trutta fario). Y echará 30.000 truchas más a medida que avance el periodo sin veda, según informó un portavoz de la consejería. La temporada pasada se repobló el río con 30.000 ejemplares menos. Cientos de pescadores acudieron ayer...

La reina de los ríos, la trucha, se puede pescar desde ayer en los cauces fluviales de la región. La temporada arrancó con una repoblación masiva de los ríos y embalses madrileños. La Consejería de Medio Ambiente proyecta echar 200.000 truchas al principio de la temporada, 170.000 de la especie arco iris (Salmo irideus) y 30.000 de la especie denominada común (Salmo trutta fario). Y echará 30.000 truchas más a medida que avance el periodo sin veda, según informó un portavoz de la consejería. La temporada pasada se repobló el río con 30.000 ejemplares menos. Cientos de pescadores acudieron ayer a sus rincones favoritos para tentar a este salmónido.La compra de las truchas le costará a Medio Ambiente 42 millones de pesetas. Cada ejemplar sale a 210 pesetas. La inversión de esta temporada supera las de años anteriores. Medio Ambiente gastó en repoblaciones 35,7 millones el año pasado, 34 en 1998 y 27,1 en 1997.

Medio Ambiente ha concedido 48.000 licencias de pesca en la región el año pasado y 11.000 en los tres meses de 2000. Muchos pescadores se quejan de que el precio es caro -cuesta 1.400 pesetas- para la poca pesca que hay, afirman.

Éste es el primer año en el que el coto de Angostura, en el tramo alto del río Lozoya, está vedado. Medio Ambiente va a instalar ahí el primer centro de investigación de la trucha autóctona madrileña. El centro pretende servir de reserva natural para la cría del salmónido con la intención de repoblar el resto del río con los ejemplares de trucha que ahí se críen.

El río Jarama estrena un tramo de pesca sin muerte, en el que hay que devolver al río las capturas. La temporada truchera concluirá el 16 de julio.