Concluye el vallado exterior de la frontera de Ceuta tras casi siete años de obras
Después de casi siete años de obras y más de 8.000 millones de pesetas de inversión, esta misma semana quedará cerrado el perímetro fronterizo exterior de Ceuta, de 8,3 kilómetros, con una valla de más de tres metros de altura. El muro levantado a lo largo de la abrupta raya que separa esta ciudad de Marruecos se ha traducido en una disminución sustancial del número de los inmigrantes que logran colarse en ella por tierra, pero también en un aumento de las pateras, según la Delegación del Gobierno.El vallado del perímetro de Ceuta y Melilla se acometió con la idea de blindar las dos fronteras ...
Después de casi siete años de obras y más de 8.000 millones de pesetas de inversión, esta misma semana quedará cerrado el perímetro fronterizo exterior de Ceuta, de 8,3 kilómetros, con una valla de más de tres metros de altura. El muro levantado a lo largo de la abrupta raya que separa esta ciudad de Marruecos se ha traducido en una disminución sustancial del número de los inmigrantes que logran colarse en ella por tierra, pero también en un aumento de las pateras, según la Delegación del Gobierno.El vallado del perímetro de Ceuta y Melilla se acometió con la idea de blindar las dos fronteras calientes españolas ante la incesante entrada de africanos por los huecos y costurones de la vieja barrera. Las obras ceutíes se han eternizado debido, entre otros motivos, a las dificultades orográficas.
El Ministerio del Interior y el de Fomento comenzaron a elevar el doble vallado de Ceuta en 1993. La inversión fue de 5.900 millones, pero antes de que estuviera concluido se demostró que era ineficaz. La debilidad del cierre provocó que prácticamente a diario se colara hasta medio centenar de inmigrantes e incluso se vivieran intentos de entradas masivas, de hasta 700 personas, que llegaban hasta la valla conducidas por guías locales.
La debilidad del blindaje y algunos accidentes naturales, como los corrimientos de tierra, probaron que ese vallado no era suficiente. El Gobierno tuvo que inyectar entonces otros 2.500 millones para reforzarlo. Además, se vio obligado a destinar temporalmente a la custodia de la frontera a un batallón de legionarios.
Las obras ya están prácticamente concluidas, según fuentes de la Delegación del Gobierno. Esta misma semana se terminará la valla exterior, un muro metálico de 3,20 metros de altura coronado de alambre de espino. Antes de que acabe el mes está previsto igualmente que se acabe la valla interior, con lo que, salvo imprevistos o nuevos fallos, Ceuta quedará blindada en coincidencia con la entrada en vigor de la nueva Ley de Extranjería.
Las citadas fuentes aseguran que el cierre exterior ha reducido la entrada de inmigrantes a entre dos y diez al día, aunque en algunas jornadas no se ha detectado ningún intento. Sí se ha notado, en cambio, un aumento de las pateras que tratan de arribar a Ceuta.