Un año para estudiar la xenofobia
La organización no gubernamental Alicante Acoge ha sido seleccionada para participar en un estudio a nivel continental sobre las actitudes de los diferentes países de la Unión Europea ante la inmigración y el auge de la xenofobia. Entre la defensa de los derechos de los vecinos de Parque Ansaldo y labores permanentes como la gestión de empleos para los inmigrantes, los voluntarios tendrán que sacar tiempo para poner en común sus experiencias con otras ocho organizaciones italianas, belgas y alemanas. La representación española se completa con el Centro de Estudios Demográficos de la Universida...
La organización no gubernamental Alicante Acoge ha sido seleccionada para participar en un estudio a nivel continental sobre las actitudes de los diferentes países de la Unión Europea ante la inmigración y el auge de la xenofobia. Entre la defensa de los derechos de los vecinos de Parque Ansaldo y labores permanentes como la gestión de empleos para los inmigrantes, los voluntarios tendrán que sacar tiempo para poner en común sus experiencias con otras ocho organizaciones italianas, belgas y alemanas. La representación española se completa con el Centro de Estudios Demográficos de la Universidad Autónoma de Barcelona.El calendario de trabajo ya está fijado y se prolongará durante el año recién estrenado. En el proyecto, aprobado por la Comisión Europea, participan organizaciones de atención social directa como Alicante Acoge e instituciones y entidades especializadas en estudiar los problemas de la inmigración, el racismo y la xenofobia. El programa establece un ciclo de reuniones en las que los participantes expondrán sus experiencias. "Es un flujo de información bidireccional, por lo que también podremos nutrirnos de los datos de otros países", señaló el director técnico de Alicante Acoge, Carlos Gómez.
La Freudenberg Stiftung de Alemania es la directora de este proyecto, y fueron sus responsables los que, atraídos por las labores de Alicante Acoge, propusieron la participación de esta ONG que actúa en el ámbito de la provincia de Alicante. El imparable fenómeno de la inmigración obliga a plantearse soluciones a situaciones reales. "Mientras que algunas instituciones optan por reprimir o ignorar el problema, la Comisión Europea está empeñada en erradicar la escalada de agresiones propiciadas por sentimientos racistas y xenófobos", señala la asociación en un comunicado.
"Es una dicotomía que mientras la Unión Europea aboga por la integración de los inmigrantes, los estados miembros se empeñen en restringir su entrada", señaló Carlos Gómez. Para él, las inminentes incorporaciones de nuevos países a la UE no hacen sino reafirmar el destino de Europa como un entorno multicultural y multirracial.
La comisión del proyecto deberá remitir un informe a la Comisión Europea para que ésta pueda conocer de primera mano cómo se las gasta cada país en temas de inmigración. Importa sobre todo constatar qué atención se presta a la integración de los inmigrantes, especialmente los indocumentados, que son los que más sufren la exclusión social.
"La inmigración hay que conocerla y canalizarla", señaló el director técnico de Alicante Acoge. "Interesa conocer toda clase de detalles para poder propiciar la integración social y económica de los inmigrantes", dijo. La organización informará a sus compañeros de las labores de defensa de los derechos de los inmigrantes que lleva a cabo, además de explicar otras actividades, como la bolsa de empleo de la asociación.
Alicante Acoge se sabe molesta para la clase dirigente. "El hecho de que nuestra asociación se incorpore a este proyecto transnacional es importante porque supone un reconocimiento a una labor que aquí pasa muchas veces desapercibida porque determinadas personas e instituciones prefieren ignorarnos", dijo Gómez. Un ejemplo de esta aseveración es el veto que la Subdelegación del Gobierno mantiene sobre Alicante Acoge en el dispositivo de ayuda durante la Operación Paso del Estrecho.
"Intentaremos equilibrar la balanza", señaló Gómez, aunque reconoció que será difícil con casos como la demolición de Parque Ansaldo. Alicante Acoge denunció lo que, a su juicio, ha sido una acción sin el respaldo de un plan de realojos y un ejemplo de cómo "determinadas instituciones colaboran en operaciones inmobiliarias especulativas".