Educación, Sanidad y Vivienda sufrieron los principales recortes de inversión durante 1998

Eduardo Zaplana destacó en su última comparecencia ante las Cortes Valencianas el "esfuerzo inversor" desarrollado por el Consell en materia de Educación, pero olvidó que la partida para construcción de centros de enseñanza Secundaria, que concentraba la mayoría de ese "esfuerzo" en 1998, sufrió una rebaja cercana al 40% sobre la dotación inicial. Los principales recortes sobre inversiones previstas en 1998 se produjeron en Educación, Sanidad y Vivienda, tres áreas sensibles que ponen en entredicho la vocación "social" de los presupuestos de la Generalitat.

La Generalitat tenía previsto...

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Eduardo Zaplana destacó en su última comparecencia ante las Cortes Valencianas el "esfuerzo inversor" desarrollado por el Consell en materia de Educación, pero olvidó que la partida para construcción de centros de enseñanza Secundaria, que concentraba la mayoría de ese "esfuerzo" en 1998, sufrió una rebaja cercana al 40% sobre la dotación inicial. Los principales recortes sobre inversiones previstas en 1998 se produjeron en Educación, Sanidad y Vivienda, tres áreas sensibles que ponen en entredicho la vocación "social" de los presupuestos de la Generalitat.

La Generalitat tenía previsto destinar a inversiones reales durante el año 1998 un total de 120.008 millones de pesetas. El presupuesto definitivo se redujo en 9.000 millones. La Cuenta General de la Generalitat correspondiente a 1998, que revisa en la actualidad la Sindicatura de Cuentas, establece que llegaron a desarrollarse proyectos de inversión que sumaron un total de 97.186 millones. Los pagos efectivamente ordenados se quedaron en 61.815 millones, prácticamente la mitad de lo previsto.El capítulo correspondiente a las transferencias de capital, para que otras instituciones desarrollen proyectos de inversión, corrió una suerte paralela. Sobre una previsión inicial de 75.096 millones, que se revisó al alza hasta alcanzar los 99.127 millones, se llegó a comprometer un gasto de 79.692 millones, pero sólo se llegaron a ordenar pagos por un total de 50.002. Una vez más, la mitad de lo previsto.

Vicente Rambla, consejero de Economía y Hacienda, explicó el pasado viernes que el gasto social constituye la única fórmula para "garantizar una distribución equitativa" de la riqueza. Y anunció específicamente un esfuerzo en el área de Vivienda.

La Consejería de Obras Públicas asume el mayor volumen de inversiones de la Generalitat y ejecuta sus previsiones de gasto con mayor solvencia que cualquier otra. Pero precisamente en el área de Vivienda introdujo uno de los recortes más significativos durante el ejercicio de 1998. Sobre un total de 9.893 millones destinados a la construcción de vivienda social, Obras Públicas recortó 1.872 millones, casi un 20% del presupuesto definitivo. Los pagos autorizados a lo largo del ejercicio llegaron a 6.874 millones, pero finalmente sólo se desembolsaron de forma efectiva 3.634.

Educación había previsto invertir 18.320 millones en el capítulo de centros docentes, una propuesta que se modificó a la baja hasta 14.015 millones durante 1998. La partida más afectada fue la correspondiente a centros de enseñanzas Secundarias. Su dotación inicial era de 11.895 millones, cuyo destino es adaptar la oferta docente de la red pública a las exigencias de la LOGSE. Pero fue reducida drásticamente a 7.526 millones. Durante 1998, Educación comprometió inversiones para centros de enseñanza Secundaria por un total de 6.640 millones. Pero las cantidades efectivamente desembolsadas a lo largo del ejercicio se quedaron en 3.579 millones.

En el ámbito de Sanidad los recortes más importantes se produjeron en el área de asistencia especializada. Las inversiones aprobadas por las Cortes durante del debate de los presupuestos ascendían a 7.657 millones. Pero esas previsiones fueron reducidas en 1.566 millones a lo largo del año. Sanidad autorizó finalmente inversiones en el área de asistencia especializada de 5.648 millones, de los cuales fueron efectivamente desembolsados 1.714.

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Servicios Sociales

La eficacia de la gestión en materia social vuelve a ponerse en entredicho cuando se atiende a la dotación prevista para inversiones en Servicios Sociales. Sobre una previsión inicial de gasto de 2.630 millones, las revisiones a la baja sumaron 439 millones. Pero los gastos autorizados durante 1998 se quedaron en 1.541 y las facturas realmente pagadas apenas sumaron 835.

El primer objetivo del presupuesto para el año 2000 que presentó Rambla el pasado viernes es la creación de empleo, pero la eficacia de la Generalitat también queda en entredicho en ese ámbito cuando se revisan los datos correspondientes a la ejecución desarrollada durante 1998.

La dotación para inversiones en el capítulo de Formación Profesional ocupacional ascendía a 423 millones. Pero los responsables de Empleo sólo fueron capaces de autorizar gastos por un total de 197 millones, de los que sólo desembolsaron efectivamente 66 millones.

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