El Festival Internacional de Teatro de Vitoria se suma hoy a la celebración del nacimiento del pintor Velázquez

La celebración de la efeméride de cualquier dramaturgo o literato siempre se recuerda en el teatro, como han demostrado las recientes producciones dedicadas a Federico García Lorca o La Celestina y que han visitado el Festival Internacional de Teatro de Vitoria en la pasada edición y en la presente.

En esta ocasión, el homenajeado en Vitoria es, sin embargo, Velázquez, (Sevilla, 1599-Madrid, 1660) un pintor cuya biografía es bastante menos conocida que su obra y que no tuvo especial vinculación con el arte dramático. Los espejos de Velázquez, que se pondrá en escena en el Teatro Princip...

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La celebración de la efeméride de cualquier dramaturgo o literato siempre se recuerda en el teatro, como han demostrado las recientes producciones dedicadas a Federico García Lorca o La Celestina y que han visitado el Festival Internacional de Teatro de Vitoria en la pasada edición y en la presente.

En esta ocasión, el homenajeado en Vitoria es, sin embargo, Velázquez, (Sevilla, 1599-Madrid, 1660) un pintor cuya biografía es bastante menos conocida que su obra y que no tuvo especial vinculación con el arte dramático. Los espejos de Velázquez, que se pondrá en escena en el Teatro Principal hoy jueves (20.30) es una incursión en el mundo que recreó el artista sevillano, realizada por Antonio Álamo en una producción de Territorio Nuevos Tiempos dirigida por Pepa Gamboa y Ricardo Iniesta.

Los espejos de Velázquez surge del estudio de la obra de este artista más que de su propia vida. Como explica su autor, "tal vez el tema prominente de sus pinturas sea el poder". A partir de esta primera constatación de Antonio Álamo y de las imágenes que aparecen en los cuadros del pintor, la obra va recreando, como si los lienzos fueran espejos, lo que veía Velázquez, la España del siglo XVII. Y, sobre todo, la que se paseaba por la corte de Felipe IV, el conde-duque de Olivares, sin olvidar su estancia en Italia donde pintó al papa Inocencio X o La Fragua de Vulcano.

Y es que Velázquez es el artista cortesano por excelencia. "Un pintor a la sombra del poder, un pintor que escala puestos mientras España guerrea, se descoyunta, agoniza, se pudre", señala Antonio Álamo.

Aunque Álamo no olvida en su recreación teatral al pintor que también vio el otro lado de la España de la época. Es también el artista que mejor ha reflejado "con tanto contraste, con tanta nitidez, la España quimérica de la época. Acaso sólo Cervantes, aunque en otro terreno, pueda rivalizar con él", añade el autor.

Tras Los espejos de Velázquez el Festival Internacional de Teatro de Vitoria presentará la obra con la que el Orfeón Bergarés celebra sus bodas de oro: el musical Oliver, basado en la novela original de Charles Dickens, con libreto, música y letras de Lionel Bart. La función, el sábado 16, a partir de las 20.30.

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