Jospin ofrece en Córcega un debate sobre un nuevo estatuto de autonomía a cambio del fin de la violencia

"Córcega es parte de la nación francesa y la nación francesa estaría incompleta sin Córcega", dijo ayer el primer ministro, Lionel Jospin, ante los miembros de la Asamblea Regional Corsa. Jospin ofreció un debate sobre un nuevo estatuto de autonomía a cambio del fin de la violencia. Su viaje, el primero después de la visita relámpago provocada por el asesinato del prefecto Claude Erignac el 6 de febrero de 1998, había despertado una gran expectación. Se esperaba que Jospin, tras la crisis generada por el incendio de un chiringuito playero por orden del prefecto Bernard Bonnet -el 26 de abril ...

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"Córcega es parte de la nación francesa y la nación francesa estaría incompleta sin Córcega", dijo ayer el primer ministro, Lionel Jospin, ante los miembros de la Asamblea Regional Corsa. Jospin ofreció un debate sobre un nuevo estatuto de autonomía a cambio del fin de la violencia. Su viaje, el primero después de la visita relámpago provocada por el asesinato del prefecto Claude Erignac el 6 de febrero de 1998, había despertado una gran expectación. Se esperaba que Jospin, tras la crisis generada por el incendio de un chiringuito playero por orden del prefecto Bernard Bonnet -el 26 de abril de 1999-, retomase la iniciativa política y abordase la cuestión de un nuevo Estatuto, llamado de "autonomía interna", que ampliaría las competencias del de 1991. Jospin se mostró dispuesto a debatir la cuestión pero recordó que "la condena de la violencia es la condición previa a toda evolución".

Si en la Asamblea Regional el debate fue un modelo de tolerancia, en la calle, durante los días y horas previas a la visita de Jospin, el tono había sido otro. Dos explosiones, en una delegación de Hacienda en Ajaccio y en un tribunal de Porto Vecchio, recordaron el enfrentamiento entre los nacionalistas y el Estado. París, por su cuenta, había logrado hace apenas una semana que Nicaragua entregase a Francia a cinco miembros de la muy dividida familia nacionalista acusados, entre otros delitos, de tráfico de estupefacientes. Eso motivó que el sábado 4 de septiembre se manifestasen en Ajaccio 500 personas convocadas por nada menos que 13 organizaciones distintas. Uno de sus líderes, el diputado regional Jean-Guy Talamoni, argumentó que sin violencia no obtendrían nada: "¿Qué habrían conseguido los irlandeses o Arafat sin ella?", dijo.

Jospin admitió "las imperfecciones de la democracia y los errores del Estado" pero les recordó que Córcega era la región francesa que más dinero per cápita recibe del Estado. La oferta jospiana admite discutirlo todo, incluida la enseñanza optativa de la lengua corsa, que "no puede ser obligatoria porque la medida iría en contra de las libertades individuales".

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