Todos los partidos exigen al Gobierno que cancele los actos de jubilados

Jordi Pujol no ordenará que se supriman o pospongan los actos multitudinarios para jubilados que el Gobierno catalán prepara para el mes de septiembre, según manifestó ayer un portavoz de la Generalitat. Salvo CiU, todos los partidos se sumaron ayer a la petición formulada el jueves por el PSC para que Pujol paralice los preparativos de las concentraciones de jubilados organizadas por el Departamento de Bienestar Social, en las que prevé la participación de más de 200.000 personas. Alberto Fernández, del PP, dijo que los métodos de CiU "recuerdan otros tiempos políticos".

Pujol no quiso...

Jordi Pujol no ordenará que se supriman o pospongan los actos multitudinarios para jubilados que el Gobierno catalán prepara para el mes de septiembre, según manifestó ayer un portavoz de la Generalitat. Salvo CiU, todos los partidos se sumaron ayer a la petición formulada el jueves por el PSC para que Pujol paralice los preparativos de las concentraciones de jubilados organizadas por el Departamento de Bienestar Social, en las que prevé la participación de más de 200.000 personas. Alberto Fernández, del PP, dijo que los métodos de CiU "recuerdan otros tiempos políticos".

Pujol no quiso dar personalmente su negativa a las exigencias de los demás partidos, que consideran un uso y abuso partidista de los medios de la Administración la celebración de concentraciones de jubilados en época electoral. Pero el portavoz oficial indicó a Europa Press que "la fecha del Día Internacional de la Tercera Edad no la fija el Gobierno catalán sino la ONU". Bienestar Social prepara un Salón de la Gente Mayor de Cataluña por cuyas carpas instaladas en el Moll de la Fusta de Barcelona prevé el paso de 200.000 personas. También prepara un un encuentro de 2.000 usuarias del programa Mujeres hoy, para el día 16 en el Auditori. Para el 18 de septiembre ha organizado una concentración en el monasterio de Montserrat de 1.500 personas, en el marco del programa Descubre Cataluña. La guinda es que para el 30 de septiembre, el día antes de que comience la campaña electoral oficial, prepara una concentración de 16.500 jubilados traídos en autocares desde toda Cataluña al Palau Sant Jordi de Montjuïc. Alberto Fernández pidió la supresión de estas actividades, en las que está prevista la intervención de representantes del Gobierno de CiU, porque en estos momentos no escapan a la consideración de utilización "electoralista" de la Administración. Uno de los vicesecretarios generales de ERC, Joan Puigcercós, dijo que el Gobierno de Pujol debiera suspender estas actividades "por sensatez" y le acusó de "pervertir" las elecciones. Anunció que pretende llevar este asunto a la Diputación Permanente del Parlament y advirtió que el electorado "pasará factura" a CiU porque "ya está cansado de que le bombardeen con propaganda partidista. Rafael Ribó, de Iniciativa-Els Verds, explicó que remitirá cartas a los colectivos de la tercera edad para que no acudan al festival del 30 de septiembre "porque Pujol sólo quiere instrumentalizar a la gente mayor". El diputado socialista Joan Ferran acusó al Gobierno de CiU de escudarse en la ONU para sus convocatorias electoralistas con jubilados, pero en cambio desatender al mismo tiempo las recomendaciones de este organismo según las cuales habría que crear 3 plazas públicas de residencia geriátrica por cada 100 personas de más de 65 años. En Cataluña faltan más de 10.000 plazas públicas para alcanzar el criterio de la ONU, afirmó Ferran. PASA A LA PÁGINA 3