Dos "cazas" indios derriban un avión militar de Pakistán y matan a sus 16 ocupantes

Dos cazas Mig-21 indios derribaron ayer un avión de hélice de reconocimiento marítimo paquistaní en la zona fronteriza entre ambos países en el océano Índico. Los 16 ocupantes del aparato paquistaní perecieron en el ataque. Islamabad calificó el incidente de "asesinato a sangre fría" y anunció que se reservaba el derecho a dar "una respuesta adecuada". El derribo del avión se produce al tiempo de un recrudecimiento de las relaciones indo-paquistaníes, con Nueva Delhi denunciando el desmantelamiento de una red de saboteadores islámicos e Islamabad expulsando a un diplomático indio.

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Dos cazas Mig-21 indios derribaron ayer un avión de hélice de reconocimiento marítimo paquistaní en la zona fronteriza entre ambos países en el océano Índico. Los 16 ocupantes del aparato paquistaní perecieron en el ataque. Islamabad calificó el incidente de "asesinato a sangre fría" y anunció que se reservaba el derecho a dar "una respuesta adecuada". El derribo del avión se produce al tiempo de un recrudecimiento de las relaciones indo-paquistaníes, con Nueva Delhi denunciando el desmantelamiento de una red de saboteadores islámicos e Islamabad expulsando a un diplomático indio.

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El Ministerio de Defensa indio dijo que el avión de reconocimiento y control submarino paquistaní había penetrado unos 10 kilómetros en territorio indio en Kori Creek, una zona de marismas que se abre al mar Arábigo en el Estado de Gujarat. Dos Mig-21 le salieron al paso a las 11.15 (7.45, hora peninsular española) y uno de ellos disparó un misil cuando el avión paquistaní se negó a afectuar el aterrizaje que se le ordenaba. "No tuvimos otra opción que disparar", comentó un portavoz. Un mapa mostrado por India señalaba el punto de caída a dos kilómetros de la frontera marítima entre ambos países sobre aguas indias.Pero Pakistán negó todos estos extremos y aseguró que su avión, desarmado, fue derribado en pleno territorio paquistaní y que cayó cerca de la localidad costera de Badin, a unos 230 kilómetros de la frontera, de ahí la etiqueta de "asesinato a sangre fría". "Esta agresión ha desembocado en el asesinato a sangre fría de 16 personas inocentes, lo que es repudiable y merece la condena de la comunidad internacional", señaló un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores en Islamabad.

"La responsabilidad de esta execrable y cobarde acción, así como la de sus consecuencias, recaen exclusivamente en India", declaró el jefe de la diplomacia de Pakistán, Sartaj Aziz. "Pakistán se reserva el derecho a una respuesta adecuada en defensa propia".

Máxima alerta

George Fernandes, ministro de Defensa indio, anunció que había puesto en alerta a la marina y a la fuerza aérea del suroeste, aunque los directores generales de operaciones militares de ambos países habían hablado a través de una línea roja. "El motivo de la intrusión podía haber sido un reconocimiento o ver qué situación había en el mar, u otras ideas", manifestó Fernandes. "Hay que tener en cuenta que nos han amenazado con otros Kargil".Kargil es la zona fronteriza en Cachemira sobre la que indios y paquistaníes se estuvieron combatiendo desde finales de mayo hasta el mes de julio como consecuencia de la infiltración desde Pakistán de cientos de milicianos islamistas de los que pretenden que Cachemira pase a ser controlada íntegramente por Pakistán. Ahora, dos tercios del territorio, habitado en su mayor parte por musulmanes, son administrados por India. Durante aquellos enfrentamientos, Pakistán derribó un Mig-21 indio.

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El incidente aéreo de ayer se produjo mientras en tierra Islamabad ordenaba la expulsión de un diplomático indio por desarrollar "actividades incompatibles con su estatuto oficial", lo que en la jerga diplomática se entiende por espionaje. La orden fue emitida al poco de que India diese cuenta del desmantelamiento de una red de agentes controlada por Pakistán que había llevado a cabo 24 actos de sabotaje en el Estado nororiental indio de Assam en los pasados meses.

La policía india informó de que un reloj de pulsera que podía transmitir mensajes codificados y una agenda electrónica ocupados a cuatro agentes de la Inteligencia Interservicios (ISI, el espionaje de Pakistán), ha permitido descubrir y desmantelar una operación más amplia. Los presuntos agentes paquistaníes penetraron en Assam a través de Bangladesh. "Su objetivo era preparar a jóvenes musulmanes y crear un Estado islámico con Assam y otras partes de la región" , indicó un portavoz policial indio.

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