La Universidad no cierra el comedor que provocó el brote de "salmonella"
La Delegación de Salud de Granada ha anunciado que los comedores universitarios de Fuentenueva, donde el pasado jueves se produjo un brote de salmonellosis, permanecerán abiertos al público pese a que el número de personas intoxicadas ascendía ayer a 131. El delegado, Francisco Cano, explicó que la Universidad ha decidido seguir ofreciendo comidas, aunque cambiará temporalmente a todo el personal de cocina y preparará menús con bajo riesgo de provocar intoxicaciones, sin huevo ni leche.
El número de estudiantes afectados por salmonella no ha dejado de crecer en los tres últimos días. Si...
La Delegación de Salud de Granada ha anunciado que los comedores universitarios de Fuentenueva, donde el pasado jueves se produjo un brote de salmonellosis, permanecerán abiertos al público pese a que el número de personas intoxicadas ascendía ayer a 131. El delegado, Francisco Cano, explicó que la Universidad ha decidido seguir ofreciendo comidas, aunque cambiará temporalmente a todo el personal de cocina y preparará menús con bajo riesgo de provocar intoxicaciones, sin huevo ni leche.
El número de estudiantes afectados por salmonella no ha dejado de crecer en los tres últimos días. Si el pasado viernes los centros de urgencia de los hospitales de la capital atendieron a 39 personas, el sábado la cifra se disparó hasta 116 y ayer aumentó hasta 131. En opinión de Cano, "la crisis se encuentra en su recta final y no se producirán muchos casos más". Los intoxicados sufren fiebre alta, diarreas y vómitos. "Ninguno corre peligro serio", señaló Cano, "aunque nueve personas que responden con dificultad al tratamiento médico permanecen hospitalizadas". Los técnicos epidemiólogos de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Granada identificaron el sábado el origen de la intoxicación en la bacteria Salmonella Enteritidis del grupo D. Sin embargo, la complejidad de los análisis ha imposibilitado averiguar si se introdujo a través de un alimento en mal estado o si fue propagada por un trabajador del comedor. Todo el personal de cocina de Fuentenueva pasará hoy un examen médico con el fin de identificar a un posible "portador sano" de la enfermedad. Mientras tanto, los comedores seguirán atendiendo a los estudiantes con trabajadores sustitutos. Para evitar nuevos brotes, se han ideado unos menús de bajo riesgo en el que se eliminan las salsas y los alimentos se guisan a altas temperaturas. En el almuerzo de hoy se servirá potaje de verduras y carne a la parrilla con patatas fritas. El pasado jueves, el día en que se produjo la intoxicación masiva, la comida estuvo compuesta por fritura de pescado, ensalada, carne mechada con bechamel y pastel de fresas. La mayoría de los afectados fueron atendidos en el hospital Virgen de las Nieves, donde se les sometió a un periodo de observación. "Casi todos evolucionan de forma favorable a las pocas horas de administrarles la medicación, ya que presentan un cuadro clínico bastante benigno", manifestó Francisco Cano. La deshidratación, fruto de las diarreas, es el principal problema al que tienen que hacer frente los intoxicados.