Jueves de pasión en la N-1
La N-1 a su paso por Vitoria echaba humo por la mañana de ayer. Los conductores que se dirigían al sur tuvieron que soportar más de 20 kilómetros de retenciones y tráfico muy lento, hasta el cuello de botella que se formó en el peaje de Armiñón para enlazar con la autopista A-1, en dirección Burgos y Madrid. Durante más de tres horas, desde las nueve de la mañana hasta bien entradas las dos de la tarde, miles de vehículos se vieron atrapados en un desesperante atasco sin salida. La primera jornada de la operación salida se cerró con el resultado de cinco personas muertas en un accidente que s...
La N-1 a su paso por Vitoria echaba humo por la mañana de ayer. Los conductores que se dirigían al sur tuvieron que soportar más de 20 kilómetros de retenciones y tráfico muy lento, hasta el cuello de botella que se formó en el peaje de Armiñón para enlazar con la autopista A-1, en dirección Burgos y Madrid. Durante más de tres horas, desde las nueve de la mañana hasta bien entradas las dos de la tarde, miles de vehículos se vieron atrapados en un desesperante atasco sin salida. La primera jornada de la operación salida se cerró con el resultado de cinco personas muertas en un accidente que se produjo a las 8.45 horas en las cercanías de Tudela, Navarra, y otras nueve heridas, tres de ellas graves, en otros tres accidentes registrados en Gatika, Barakaldo y Andoain.