Mariscal puso en apuros a Piqué

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No lo tuvo ayer fácil el portavoz del Gobierno, Josep Piqué, para explicar la decisión del Consejo de Ministros de conceder un indulto parcial a José Barrionuevo y Rafael Vera. Y no lo tuvo fácil sobre todo porque la ministra de Justicia, Margarita Mariscal de Gante, se había encargado de complicárselo cuando hace tan solo cinco días dijo que había expedientes de peticiones de indulto acumulados desde marzo y abril y que ella no estaba dispuesta a otorgar preferencia alguna a los de Barrionuevo y Vera.Gracias a esas declaraciones de Mariscal -por cierto, la ministra no compareció en la rueda de prensa posterior al Consejo pese a ser la responsable del informe sobre el indulto que estudió el Ejecutivo-, Piqué tuvo que afrontar una riada de preguntas sobre la discriminación favorable a Barrionuevo y Vera una vez que anunció la concesión de la medida de gracia para ellos y otros condenados.

El portavoz salió como pudo del acoso periodístico e incluso trató de proteger a la ministra. No lo pudo hacer del todo y desmintió abiertamente a su compañera cuando dijo que el Gobierno ha agilizado los trámites en los casos urgentes hasta en un mes.

Finalmente, Piqué reconoció que el Consejo ha dado un tratamiento especial a este expediente frente a las anunciadas pretensiones de Mariscal de Gante en sentido contrario.

Asimismo, el portavoz se amparó en el secreto del Consejo para negar que haya disensiones en el Gabinete por este asunto.