Propietarios de suelo exigieron 3.000 millones en dinero negro al Ivima

El Instituto de Vivienda de Madrid (Ivima) ha destapado uno de los casos de intento de fraude fiscal más importantes de los últimos años, perpetrado en pleno auge del negocio inmobiliario en la capital.El Ivima negoció la compra de tres millones de metros cuadrados en el polígono de Valdecarros (Vicálvaro) para construir pisos baratos. Los propietarios e intermediarios de la operación exigieron una fórmula ilegal para cerrar el trato: por los tres millones de metros cuadrados, cuyo precio rondaría los 6.000 millones de pesetas, según los cálculos del Ivima, los dueños fijaron un método de pago...

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El Instituto de Vivienda de Madrid (Ivima) ha destapado uno de los casos de intento de fraude fiscal más importantes de los últimos años, perpetrado en pleno auge del negocio inmobiliario en la capital.El Ivima negoció la compra de tres millones de metros cuadrados en el polígono de Valdecarros (Vicálvaro) para construir pisos baratos. Los propietarios e intermediarios de la operación exigieron una fórmula ilegal para cerrar el trato: por los tres millones de metros cuadrados, cuyo precio rondaría los 6.000 millones de pesetas, según los cálculos del Ivima, los dueños fijaron un método de pago fraudulento: la mitad, 3.000 millones, en dinero negro para evitar los impuestos.

Esta exigencia frustró la operación. "La Administración no puede cometer ilegalidades", explicó ayer en la Asamblea el gerente del Ivima, Juan José Franch, a los diputados de la Comisión de Obras Públicas. Franch no facilitó el nombre de los que quisieron cometer fraude cobrando en dinero negro.

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El consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés, reconoció por la tarde que había existido un intento de fraude fiscal a gran escala, según le había contado Franch, aunque aclaró que, cuando se trata de vender suelo a las administraciones públicas, no es posible saltarse la ley. "No tenemos caja b para pagar en dinero negro. Desde luego, en los consorcios públicos donde está la Comunidad es imposible efectuar estas operaciones", señaló Cortés. La propiedad del suelo, previamente expropiado por los consorcios públicos, es de la Comunidad y de los ayuntamientos.Madrid renunció a usar esta fórmula en los nuevos barrios.

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"Me parece imposible"

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El edil de Urbanismo anima a denunciar el intento de fraude ante el fiscal anticorrupción

El concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, del PP, animó ayer al gerente del Ivima a que acuda "a denunciar el hecho al fiscal anticorrupción si es que no ha ido ya". "Aunque a mí me parece imposible que alguien pueda exigir el pago de 3.000 millones de pesetas en negro", añadió.El edil de Urbanismo niega que el hecho de que la gestión de los nuevos barrios esté en manos de los privados acarree especulación y la irrupción de maletines con dinero yendo y viniendo. "No me parece justo identificar la gestión privada con la especulación, esto es absurdo", añadió.

El responsable municipal de Urbanismo respondió a las críticas de las cooperativas indicando que hay muchas de estas empresas que "han comprado suelo y otras muchas que no, y las condiciones han sido las mismas; y las que no han comprado ahora se dedican a dibujar un panorama que parece de película fantástica de Viernes 13". "Hay quien no ha comprado suelo y espera que el Ayuntamiento renuncie a su 10% que por ley le corresponde en los nuevos barrios para otorgárselo a él, y a esas presiones sí que no se va a plegar este equipo de gobierno", concluyó el concejal.

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