Intríngulis impulsa una campaña teatral dirigida a 8.400 estudiantes de escuelas de San Sebastián
La asociación Intríngulis tiene claro que el futuro del teatro está en manos de los más jóvenes. Por eso organiza por segundo año consecutivo la campaña Behin batean. Haur antzerki erakustaldiak, que aspira a involucrar a 8.400 escolares de 50 centros de San Sebastián y sus alrededores. El programa, que arrancó el pasado día 14, ofrecerá seis propuestas teatrales, en treinta funciones, hasta mediados del mes de marzo. "Los críos son más canallas que los adultos, más honestos. Si les gusta el espectáculo se enganchan de verdad, si no, giran la cabeza y empiezan a hablar con el compañero", dijo...
La asociación Intríngulis tiene claro que el futuro del teatro está en manos de los más jóvenes. Por eso organiza por segundo año consecutivo la campaña Behin batean. Haur antzerki erakustaldiak, que aspira a involucrar a 8.400 escolares de 50 centros de San Sebastián y sus alrededores. El programa, que arrancó el pasado día 14, ofrecerá seis propuestas teatrales, en treinta funciones, hasta mediados del mes de marzo. "Los críos son más canallas que los adultos, más honestos. Si les gusta el espectáculo se enganchan de verdad, si no, giran la cabeza y empiezan a hablar con el compañero", dijo ayer un integrante de la compañía Markeline, que presenta hoy su espectáculo La vuelta al mundo en 80 cajas ante 280 niños. Conscientes de la dificultad que entraña mantener la atención de los escolares -entre seis y doce años-, los organizadores han seleccionado seis obras de un hora de duración, con grandes dosis de fantasía, que persiguen estimular la imaginación. En esta campaña participarán La paca teatro, con su obra Colorín colorao; Sambhu teatroa con Lenaren sekretua; Roberts Antzerkia, que llevará a escena Pertza mágikoa; Trokolo Antzerkia, con Ali Baba y los 40 ladrones y Ados teatroa. Los espectáculos se complementan con una serie de actividades pedagógicas paralelas que desarrollan los niños en los centros escolares. Intríngulis, con la colaboración de Donostia Kultura y el área de Educación donostiarra, busca así sembrar en los niños la pasión por el teatro y garantizar la supervivencia de este arte en el futuro.