El Kremlin anuncia una próxima cumbre germano-rusa
El presidente ruso, Borís Yeltsin, mantendrá una reunión con el canciller electo de Alemania, Gerhard Schröder, anunció ayer el portavoz del líder ruso, Dmitri Yakushin, quien no informó de las posibles fechas, pero aseguró que se celebrará "pronto". "El presidente felicitó a Schröder por su triunfo y le expresó su confianza en que continuarán desarrollándose las relaciones bilaterales y los contactos con la nueva dirección alemana", dijo Yakushin.Éstos son los primeros comentarios de Yeltsin sobre las elecciones alemanas. La derrota de Helmut Kohl, el principal aliado occidental de Yeltsin, h...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El presidente ruso, Borís Yeltsin, mantendrá una reunión con el canciller electo de Alemania, Gerhard Schröder, anunció ayer el portavoz del líder ruso, Dmitri Yakushin, quien no informó de las posibles fechas, pero aseguró que se celebrará "pronto". "El presidente felicitó a Schröder por su triunfo y le expresó su confianza en que continuarán desarrollándose las relaciones bilaterales y los contactos con la nueva dirección alemana", dijo Yakushin.Éstos son los primeros comentarios de Yeltsin sobre las elecciones alemanas. La derrota de Helmut Kohl, el principal aliado occidental de Yeltsin, ha significado un serio revés para el Kremlin El líder ruso habló ayer también con Kohl, con quien ha desarrollado una relación de amistad, y le agradeció "su gran aportación personal al fortalecimiento de las relaciones entre Rusia y Alemania". Este país es el principal acreedor europeo de Rusia y el que más ha sido golpeado por el atraso en los pagos de la deuda exterior, la congelación de deuda de los bancos y empresas rusas y la reestructuración de los bonos del Estado a corto plazo.
La conversación telefónica de Yeltsin con Schröder es un intento de corregir lo que Nezavísimaya Gazeta calificaba ayer como "gran error político": la indiferencia hacia "la popularidad que estaba ganando Schröder". "La derrota del canciller eterno puede ser considerada, hasta cierto punto, como una derrota personal de Yeltsin, quien en su última visita a Bonn dejó claro que sus simpatías estaban del lado de Kohl", comentaba ayer el influyente diario ruso.
Para el Kremlin es vital que las palabras de Schröder no se limiten a ser una fórmula de simple cortesía, sino que se traduzcan en una política concreta